sábado, 7 de diciembre de 2013

184. Jesús, que jamás nos separemos de tu Totalidad en Salida: Ecli 43, 23-33



    Gracias al Señor su mensajero llega a buen puerto. Gracias a su Palabra se ordenan todas las cosas. Podríamos decir mucho más, y nunca acabaríamos. Mi conclusión es esta, Dios es Todo. Pero Él es más grande que todas sus obras. Jesús Ayer Hoy Mañana, tú me has hecho experimentar tus Plenitudes. Nunca he escrito durante 60 años, nada que no estuviera en relación con tu Totalidad. Siento no haber podido engrandecerte con la maestría de María y los grandes santos, teólogos, místicos, literatos y doctores de la Iglesia. Los helechos realzan la belleza de las flores. Aunque presiento mi muerte próxima. O una parálisis me convierta en una estatua marmórea de osteoporosis. O un accidente cerebro vascular me deje cual vegetal. Bien sé que no puedo estar seguro del fin. Mientras, busco conocer el Amor de Cristo que supera todo conocimiento, para ser plenificados con la Plenitud Total de Dios. Ef 3, 14-19
    Me apresuro, anciano desgastado todavía algo lúcido, luego de Transubstanciar el pan y el vino y de Entregar al Pueblo el Cuerpo y la Sangre en la Misa, a escribirte estas palabras que poco expresarán. Es mi Acción de Gracias virtual. Mi apapachar a los lectores de este Blog. Sé que  entre las posibilidades que ofrece la comunicación digital la más importante se refiere al anuncio del Eterno Viviente. Se trata de encontrarme con hombres y mujeres reales. A quienes deseo saludar, abrazar y acompañar. A menudo tan confundidos y heridos como yo. El kerigma requiere relaciones humanas auténticas y directas que culminen en un encuentro personal con Cristo. Internet no basta, la tecnología no es suficiente. No quiero decir que la presencia de la Iglesia en la Red sea inútil. Es indispensable estar presentes, en lo que para muchos se ha convertido en un ambiente de vida. Despertar las preguntas sobre el sentido de la existencia. Indicar el camino que conduce a Aquel que es la respuesta Total. Jesús en sus Infinitos Rostros y Cuerpos. Al Verbo hecho Libro, Pan, Servicio, Resucitado, Iglesia, Cosmos y Cánticos.
    Mi incapacidad para tocar las fibras más íntimas de cada uno es supina. Los hechos están vacíos. Son recipientes que toman la forma del sentimiento que los llena. J.C. Onetti Confío en la Creatividad del Padre. Él puede hacer e inspirar Todo al infinito. Más de lo que podemos pedir o pensar, por el Dinamismo del Espíritu que trabaja en nosotros. Trato de llenarme, con la inteligente Lectio Divina, de Agua Viva. Me repetiré al renovar tu Gracia. Repitiendo seré Memorial. Siendo abuelos Memoriosos muchos viviremos en el Mar de tus Constelaciones que nos primerean.
    Inmenso agradecimiento de que misericordiando hayas venido con tu Misterio Pascual al encuentro de este microscópico pecador. Con sus tinieblas imperfecciones y errores ha molestado a varios. Me has concedido pedirte y pedirles perdón. Perdoné y he sido perdonado. Cuánto nos hemos amado en tu Iglesia. Hasta mi carne te ha gozado. La alegría del Evangelio llena el corazón y la vida entera de los que se encuentran con Jesús. Quienes se dejan salvar por Él son liberados del pecado, de la tristeza, del vacío interior, del aislamiento. Con Cristo siempre nace y renace la alegría. Cuán agradecido estoy por haberte podido regalar mi libertad, mi virginidad y mi economía en mi pusilánime vida monástica y sacerdotal. Qué sangrientas las 34 donaciones que me pediste realizar a favor de los pobres de Espíritu y de esta Tierra. Qué cruda la cruz de cada día, precio de nuestro mutuo cariño y ternura. Cuántos cálices he tenido que beber. Por cuántos túneles y bosques oscuros hemos caminado juntos, con otros pocos, para ser Custodios de tu Totalidad. Para poner a tu Iglesia en Salida hacia todos los ángeles, todos los seres humanos en esta Tierra, toda la naturaleza y el comos conocido y por conocer. Para mostrar que Tú eres el Reino de Dios al ser inseparable de toda la creación, a la que estás transfigurando en la Nueva Creación que ya despunta. Cuán largas fueron tus ausencias y qué fugaces, pero maravillosas tus Presencias. Y nunca ninguna creatura pudo separarnos jamás del Amor del Padre, manifestado por el Espíritu en Ti. Rm 8, 38-39
    Grandioso ha sido, Alfa y Omega, que me regalaras percibir, por intuiciones y argumentos convergentes y convincentes no propios de las matemáticas, y por la fe transracional, al Creador de Todo. Al Incausado Absoluto Increado Infinito Metafísico, separado de y pervadiendo a toda la creación finita. Que Tú, Trascendente, Inmanente y Transparente, fueras en tu humanidad la Imagen visible y creada del Verbo Invisible. Col 1, 15 Aquel que me revela a la Trinidad, los ángeles, los hombres, el mundo y el cosmos hacia el Reino. He sentido la belleza y tristeza asfixiante de un Mundo en procesos finitos interminables donde existe el mal. Si no peregrinara con el Resucitado hacia el Cielo Nuevo y la Tierra Nueva, existir sería por momentos inaguantable, inconveniente, torturador. El Misterio oculto desde toda la eternidad y que ahora Dios quiso manifestar a sus santos es Cristo en nosotros, esperanza de la gloria. Col 1, 26-27
    Desde ti, a quien pertenece el tiempo y la Eternidad, lo oculto de la Trinidad y del ser humano, algo se manifiesta. Pero sigue oculto. Col 3, 3 Como sucede con lo Revelado, se desvela y se revela. Falta un largo trecho hasta la Jerusalén celestial. Aun allí seguirán los desvelamientos, mi finitud nunca será tu Infinitud. Tus plenitudes se van expandiendo en nosotros hasta alcanzar la Totalidad de Cristo que está en todos. Col 3, 11 Totalidad que se olvida a toda cerrazón y exclusión. Sinónimo de un Cristo cada vez Mayor, con brazos acogedores, apertura, salida, puertas abiertas. El Resucitado para Todos. La Iglesia para Todos. Los ángeles para Todos. Los hombres para Todos. El Cosmos para Todos.
    Es la Gracia que me has regalado, atisbar estremecido que Cristo es Todo y el Todo lo trasluce a Él. El mismo Cristo de la Tradición, la Biblia, el Magisterio. El de las investigaciones de los pobres y los teólogos, no de escritorio sino besadores de las llagas de tu Pueblo. Tengo que permanecer fiel en el Memorial de la experiencia del Resucitado que tuve hace 57 años, en la Vigilia Pascual del 01.IV.56, en que Pío XII volvió a la tradición de celebrarla la noche del sábado al Domingo. Esta percepción, que se repitió el 16.IV.60 en Spencer EU y el 05.VI.69 en Galilea Israel, de la Luz Personal resucitada que lo invade y transfigura todo cambió mi interpretación de todo. Por épocas hasta tu Iglesia quiso enclaustrarte. Hacerte propiedad de unos pocos. Tú no eres propiedad de nadie. Y Todo es tu propiedad. Tú eres el Primogénito de toda la creación, en ti fueron creadas todas las cosas, todo conexiste en ti.
    Todas las cosas no son más que sombras de una Realidad futura, que es el Cuerpo de Cristo. Col 2, 17 Los Padres de la Iglesia, resumidos por Newman en su lema ex umbris et imaginibus in veritatem, me han ayudado a expresar lo indecible, sin que formulación alguna me haya dejado satisfecho. El hombre es un lazo entre Adán y el Mesías, representando más que su propio pasado y anunciando más de lo que desea recibir. Baal Shem Tov, +1760, fundador del jasidismo
    Este mundo es sólo un esquema de la Nueva Creación que se hará en Jesús resucitado Singularidad Única y Novedad Absoluta. Ahora no vemos la Realidad sino sombras, pero el reverbero de la Luz resurreccional lo invade y da existencia a todo. Para el pobre de Yahveh las sombras de este mundo que pasa transparentan esa Luz que vio Pablo. Y tantos otros a través de los siglos. Se está realizando un nuevo nacimiento. Una palingenesis, una nueva regeneración de la humanidad y el cosmos. Eso es lo que los cristianos no nos cansamos de celebrar en la Cena. El pan y el vino son la tierra de sombras, de caducidad y de muerte. Por la transubstanciación se convierten en la imagen, especies del Resucitado que nos regeneran para una esperanza viva. Hasta que nazcamos a la Verdad en la Resurrección Universal.
    El Cristo Pantocrátor y Glorioso por los siglos lo asume Todo. No hay realidad de la historia y del cosmos que no conexista en Él. Hasta el mal y el pecado, sin ser maltrecho por ellos. Y cada cristiano miembro de Cristo, se va abriendo cada vez más hacia ese Pléroma Infinito que es su Cuerpo Total. No es algo novedoso. Lo han repetido de formas distintas miles de mujeres y hombres. Pecar es separar del beso que adora. Vivir en Gracia es besar comulgando. La Luz Transfiguradora del Resucitado, sin tocar la variedad maravillosa de las formas, les da la Única Substancia que Todas anhelan, el Padre encontrado en el Verbo y el Espíritu. Jn 4, 24 En cada fragmento está el Todo interrelacionado con los Tres. Con inexactitudes y errores, que claman por la Vida Verdad y Amor de Cristo, las religiones, las filosofías, ciencias, literaturas y culturas, también ateas, lo han avizorado. Es un perfume que se huele. Una claridad que se ve. Una música que se oye. Un sabor que se gusta. Una piel que se acaricia con respeto y amor. Tiene alternancias. He tenido cientos de otras impresiones parecidas a las tres Luces del 56, 60 y 69. Tal vez la muerte, a la que me entrego con libertad, gritando cual otro ladrón desde mi cruz, será la mayor.
    No digo que este fragmentito repleto de limitaciones humanas. Una gota en un océano sin playas ni confines. Quien no sabe lo que ocurre en la Biblioteca que está a mis espaldas. Ni si el cometa Ison desapareció al acercarse al sol. Esté ensanchado a la Totalidad. Eso es sólo Jesús de Nazaret, la Suprema Complejidad Consciencia. La glocalización, unión de lo global con lo local, es el equilibrio de nuestra finitud con el Infinito. Cultivando nuestro jardín en sociedad, cuidamos de la ecología mundial. Entre globalización y localización encontramos un saludable florecer. Atención a lo Total, sin perder de vista nuestra Parte, y viceversa. Sabio es metabolizar sin empachos inútiles.
    Ya en el fragmento está el Todo, si sé trabajarlo con heroicidad. Desde el lugar y cultura donde estoy plantado, entro en comunión con el Resucitado. Capto, cual en intuición mística y social y cósmica, que Él lo llena Todo con el Ligamento del Espíritu que nos pone en interconectividad. Así nos impulsa, con Energía impetuosa, a abrirnos más y más hacia sus Galaxias en Vasos Comunicantes embarazadas de resurrección. Pero moverse hacia la Pangalaxia, que es copensar Todo en Cristo, implica la formación de cantidades de Interredes mundiales en incesante retroalimentación. Poner en comunión la Trinitariogalaxia, la angelicogalaxia, la antropogalaxia, la biogalaxia, y la inorganicogalaxia. Las cuatro últimas, espermatozoides invisibles, pequeñas esporas llevadas por tu Viento Increado.   
    Enamorado de quien cuenta el número de las estrellas y a cada una la llama por su nombre. Sal 147, 4 Respirando consideraciones para desideratas hacia lo sideral. En sinécdoques y analogías, paso de las estrellas y constelaciones a tus galaxias. Ante todo a la galaxia donde se ubica nuestro minúsculo sistema solar. Una de las 100 mil millones que hay en lo que podemos observar del universo. Posee forma de disco aplanado, con un bulbo interno y brazos en espiral. Tiene 100.000 años luz de diámetro y 5.000 años luz de espesor. Está formada por millones de estrellas, planetas, agujero negro, materia interestelar y oscura. La mayoría de las galaxias tienen un diámetro entre cien y cien mil parsecs. Están separadas por distancias de un millón de parsecs. Cada uno equivalente a 3,26 años luz. Nada ante la Relación con las Tres Personas.
    En la Trinitariogalaxia, con la Humanidad del Resucitado, está la Totalidad. Pero la creación no ha llegado a su Pléroma. Las Semina Resurrectionis, esparcidas en lo creado, están en crecimiento. Cristo, el Hombre Interior, está corroborándose. Con el ser y su conservación lo que la Trinidad nos comunica de manera directa es la Fuerza de la Resurrección hasta llegar a la Consumación Universal. El Padre es el Origen y Telos. Puerto de salida y llegada, donde cada realidad es pensada, amada y planificada. Encarnando el Evangelio del Logos hecho carne, somos empujados por el Espíritu hacia la Ciudad Resucitada con las puertas siempre abiertas en comunicación con la Totalidad.
    Eso ya le ocurrió a María y Ella lo está gestando en su Seno resucitado. Ayúdanos a dejarnos tocar por el Amor de las Plenitudes de Cristo. Que podamos palparlo por la fe, y transmitir su Gozo, Lc 10, 21 a nuestros hermanos, cuidando la ecología de este planeta. Que amemos a los animales, las plantas y los minerales. Estábamos perdidos en galaxias incomunicadas, pero hemos sido hallados e interligamentados. Estábamos muertos pero nos han conrresucitado.
    No permitas Jesús que nos separemos de tu Eucaristía Transubstanciadora y Transfiguradora hasta la Resurrección Total. Tú, Luz inseparable de realidad alguna. Recién comienzas a amanecer. Primogénito Advaita de toda creatura y de los muertos. Estás poniendo en Pie a tu amada creación. Eres la Interioridad más interior de cada persona y cosa. Nos sostendrás por toda la Eternidad. Nadie ni nada podrá arrancarnos de tus Manos. Aquí reside la alegría de Evangelizar. Si el carisma del Espíritu lo hace, ser los transparentes de ese Misterio escondido desde los siglos eternos. Tu mensajero llega a Puerto cuando te deposita escrito y regalado en este Blog. En Atracción amante cual Eterna Novedad. Allí está nuestra Esperanza. Tú eres la Única Totalidad. El Único Absoluto que sale al Encuentro de Todo y debe ser manifestado en Todo, Yo te vendré a buscar.
    

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