miércoles, 22 de enero de 2020

Blog 311. La Sabiduría sufre y supera a la iglesia de las sombras, Prov 21, 16. Ef 5, 25-33



    אָדָ֗ם תֹּ֭ועֶה מִדֶּ֣רֶךְ הַשְׂכֵּ֑ל בִּקְהַ֖ל רְפָאִ֣ים יָנֽוּחַ. Ἀνὴρ πλανώμενος ἐξ ὁδοῦ δικαιοσύνης ἐν συναγωγῇ γιγάντων ἀναπαύσεται. Vir qui erraverit a via prudentiae, in coetu umbrarum commorabitur. El ser humano que se extravía del camino de la prudencia descansará en la iglesia de las sombras. Muchos contemporáneos nuestros apenas si rebasan el aspecto humano de la Iglesia, sociedad mundial bien encuadrada aunque con gran desigualdad distribuída, de mujeres y hombres unidos por la fe la liturgia y la ética evangélica. La Escritura la designa como un Misterio, oculto en otro tiempo en Dios, pero hoy revelado y en parte realizado. Ef 1, 9. Rom 16, 25 Misterio de un pueblo todavía pecador, pero que posee las arras de la salvación, porque es la extensión del Pueblo del Padre, el Cuerpo de Cristo y el Templo del Espíritu, el Hogar del Único Dios Trinidad. Misterio de una institución carismática humano divina en la que mujeres y hombres de todas las razas y culturas, pueden hallar la Luz, el perdón y la gracia para alabanza y gloria o manifestación de los Tres y la Felicidad Pascual. Gotas de rocío que con el rostro descubierto, reflejan todo el Sol, en luz azul verde roja y resplandeciente evaporándose, y elevándose hacia Él. Tit 2, 11-15. 2 Cor 3,18. 1 Jn 3, 2-3



    Los primeros cristianos de lengua griega le dieron el nombre de Ecclesia, marcando continuidad entre Israel y el Pueblo cristiano. En los LXX la palabra designa una asamblea convocada para una reunión religiosa o cultual. Deut 23. 1 Re 8. Sal 22, 26 Corresponde al hebreo Kahal, empleado sobre todo por la escuela deuteronómica para designar la asamblea del Horeb. Deut 4, 10 y 31, 30 o de la tierra prometida Jos 8. 35 y Jue 20, 2 y por el cronista, 1 Cron 28 y 8 Neh 8, 2 para designar la asamblea litúrgica de Israel en tiempo de los reyes o después del exilio. Pero si Ecclesia significa siempre Kahal, también es traducida por otros vocablos, en particular por Synagóge, Num 16, 3 20, 4 y Dt 5,22 Iglesia y Sinagoga son términos casi sinónimos. Sant 2, 2 Se distinguirán cuando los cristianos se hayan apropiado el primero reservando el segundo al Pueblo judío, nuestros hermanos mayores. Partim ex L. Dufour, Vocabulario Bíblico

    Si la Iglesia es un Pueblo de pecadores, hasta pedestre en la actuación de muchos de sus miembros. Los dos papas de F. Meirelles Y que, sin embargo, no deja de colaborar con la Trinidad para darnos santos canonizados o no, que nos manifiestan sus proyectos para la Iglesia y el Mundo. Recuerdo a la abadesa Elena Gullini, 1892-1959 apasionada por la unidad de los cristianos que guió la entrega de Gabriella Sagheddu. 1916-1939 Une merveilleuse ouvrière de l’Unité, elle est un sceau sur l’oecuménisme spirituel. P. Couturier A Jorge Mejía, que había estudiado con Wojtyla en el Angelicum e influyó en hacerme servidor del Verbo Encartado y a quien vi por última vez en 1997 cuando visitó por una tarde nuestro monasterio al que amaba. Llegó y se fue en helicóptero y me tocó recibirlo y despedirlo. Hablando a la comunidad dijo de pronto mirándome, fíjate donde estás tú y donde estoy yo. Oración, estudio y trabajo, como en la regla de san Benito. Es lo que intentó hacer en la comisión para el judaísmo, justicia y paz, la congregación para los obispos, archivo y biblioteca apostólica, y en su última década de silencio, lectura y bien llevada ancianidad y cáncer de estómago. Francisco pudo verlo en el hospital. Se fue a la Casa del Padre a los 91 años. 09.XII.14. Historia de una identidad Hombre del Libro y de los libros, incansable pastor dedicado a la misión evangelizadora, gozoso de servir a la Iglesia y al papa desde la curia romana. Y al Christophe del Je t’aime que desgarró su carne. 1972

    Tanto en la Primera como en la Nueva Alianza, en este Pueblo Santo coexistirán por consiguiente sombras tinieblas claridades y luces, desencuentros y encuentros. En todos sin excepción, también en su jerarquía, la cizaña del pecado se encuentra mezclada con la buena semilla de Jesús hasta el fin de los tiempos. CEC, 827-829 Junto a una Iglesia que es humilde luna de Luz, porque se borra a sí misma y sólo se desvive por ser epifanía de la Luz del Crucificado Resucitado, existe también una iglesia orgulloso solcito de sombras, porque busca publicitarse mostrarse a sí misma, con pecados vicios e imperfecciones en las que podemos quedar atrapados cual en las redes idolátricas de una tóxica araña. Ya no estamos enamorados de la Trinidad, y hasta los males que vemos en la Iglesia y el Mundo nos separan del Padre el Hijo y el Espíritu. Si queremos una Iglesia inmaculada para amarla y sentirnos at Home con ella, nunca la amaremos. Dios sigue amando a cada hombre, incluso al peor. Porque no nos ama debido a que hacemos buenas acciones con nuestros pensamientos palabras y obras, y evitamos las omisiones. Nos ama de manera incondicional. Hundidos en nuestros pecados sigue amándonos y atrayéndonos hacia el Crucificado y el sacramento de la confesión que nos libran de seguir con los cerdos y volver a nuestro Padre que nos justifica santifica y glorifica. Tal cual lo hizo por anticipado con la Todasanta Siempre Virgen María Madre de Dios Asunta, Κυρία μου como no cesan de repetirle los católicos al Paradigma Inmaculado al que debe asimilarse el Pueblo Dios de la que Ella es Madre. Para los católicos no existe conocimiento de la Encarnación Pascual Trinitaria fuera de la Iglesia. No se puede presentar la disyuntiva dualista, acepto a Jesús pero rechazo a la Iglesia. Fuera del Misterio de la Iglesia no hay Salvación, porque toda redención salvación y liberación provienen de Jesucristo Inseparable Cabeza y Esposo de la Iglesia que es su Cuerpo Místico. Ef 5, 25-33. CEC, 846-848 Se puede haber entendido mal esta aseveración Fuera de la Iglesia no hay salvaciónExtra Ecclesia nulla salus. De hecho en el imaginario colectivo católico significó diferentes realidades, varias equivocadas. Se olvidaba que los que sin culpa suya no conocen el Evangelio de Cristo y su Iglesia, pero buscan a Dios con sincero corazón o mejor se dejan buscar por Él, y tratan de hacer su voluntad, conocida a través de lo que dice su conciencia, pueden conseguir la salvación eterna. Algunos todavía rechazan la aseveración porque suena mal a millones de oídos tanto católicos como no católicos. Comisión teológica internacional, El cristianismo y las religiones. Aprobada por el voto de la Comisión y el cardenal Ratzinger en 1996 Hay hubo y habrá varias modalidades de ser Iglesia, no sólo para liberales de izquierda o conservadores de derecha. La Madre Kejaritomene llena de Gracia, se convirtió en discípula de su Hijo. Ella verdadera Madre e Hija de la Sabiduría Divina no lo seguía como a un simple hombre, sino como a Dios hecho Hombre, y escuchaba sus palabras como a la Palabra de Dios. San Máximo el Confesor, Homologetes. 580-662. Vida de la Virgen

    Los matices no implican herejías cismas ni rechazos separatistas. C.G. Vallés, sin juzgar ni condenar a grupos ni personas, con su delicada respetuosa prosa poética escribió, Querida Iglesia en 1996, mostrando, esas tensiones. Todos vemos de maneras distintas, agregamos a la realidad nuestras interpretaciones. Y necesitamos el Evangelium sine glossa, de saludables hermenéuticas para liberarnos en la Mente de Jesús. El pasado presente y futuro existen, pero si los interpreto sin metánoia o transconscientización hacia la Mente del Resucitado que está en medio y dentro de cada uno, caigo en un sufrimiento inútil y malsano. El dolor y los problemas constantes existen. Pero el sufrimiento cual antivalor agregado es una interpretación patológica de mi mente acosada por el error y el pecado. La realidad de mal y bien entrelazados existe y es por lo general inamovible, la tengo que dilucidar y tratar de mejorar si eso es posible. Mas, como dice Jesús, sin resistencias antievangélicas, μὴ ἀντιστῆναι τῷ πονηρῷMt 5, 39 ni merimnias y con saludables amerimnias. Μὴ οὖν μεριμνήσητε λέγοντες τί φάγωμε, ἤ τί πίωμε, ἤ τί περιβαλώμεθα. Mt 6, 25-34 A cada día le toca su propia fealdad. La lucha imprudente se hará insoportable. La sabia, iluminada por la doctrina social de la Iglesia, una bendición para el Pueblo de Dios peregrinando en este Mundo. Entre 1870 y 1914 unos diecisiete millones de italianos, la mitad de la población de Italia, emigraron a varios países. Cinco millones a EU y tres millones a Argentina. Una mujer excepcional, santa Francesca Saverio Cabrini, 1850-1917 con sus Hermanas Misioneras del Sagrado Corazón, la fundó con ocho y en 1907 tenía más de mil realizó una obra grandiosa para sacar a miles, sobre todo de italianos, de la desesperación, el analfabetismo, el hambre, la persecución, la enfermedad, la marginación y las mafias. Desembarcó en New York en 1889 y en 1895 en Buenos Aires. Me padre un socialista santafesisno las visitaba conmigo en Rosario.

    Tus juicios, Señor, son como un océano inmenso. En Ti está la fuente de la vida, y tu luz nos hace ver la LuzSal 36, 7-10 Las multiconciencias, o la conciencia con decenas de diferentes impetuosas corrientes que nos habitan, hay que irlas integrando con la conciencia oceánica trascendental de la Trinidad en la Luz del Resucitado. Von Balthasar en el prólogo de su artículo sobre Henri de Lubac. La obra orgánica de una vida1976 nos cuenta que poco antes de que lo publicara Henri le envió un manuscrito de 150 páginas en que explicaba el origen y sentido de sus libros situándolos en el contexto de las etapas de su vida, estudios, contactos, amistades, artículos, como de los legendarios avisos y rechazos que le depararon los jesuitas y la Iglesia, en especial desde 1946 hasta 1956. Las notas de Henri están llenas de meandros, las de Hans de sistematizaciones, sin pretender meter en una camisa de fuerza a una obra abierta en todas las direcciones. Casi todo lo que ha escrito, 40 volúmenes publicados, cientos de miles de referencias, y cantidades de artículos, es fruto de circunstancias imprevistas, disperso y sin preparación técnica. No obstante en este variopinto tejido hecho al ritmo de conferencias, tareas pastorales, situaciones y encargos de todo tipo se puede distinguir una trama que le da unidad. Un aspecto es la paradoja del ser humano sediento que es capax Dei et desiderium Dei, está hecho para abrazar y entrar en comunión con la Trinidad, pero no puede lograrlo sino por puro Don, para alabar la gloria de su Gracia. Ef 1, 6 Todo lo natural está encerrado y traspasado en lo Sobrenatural, Dios y su Gracia manifestada en Jesús. Necesitamos de instrumentos verbales para sostener y manifestar nuestra fe, por Gracia que es Don y libertad. Víctor Fernández, La Gracia y la vida entera

    La Iglesia, católica y santa de pecadores, no existe para Ella sino para llevar a los demás al Crucificado que Resucita. No es un fin en sí misma, es un medio para el Fin que es la Trinidad. Humilde servidora de Dios la humanidad y la naturaleza. Es responsable y debemos rendir cuenta a Dios los hombres y la ecología. La Trinidad ama a los pecadores y sale a su encuentro para transfigurarlos. Lo peor es que los cristianos nos tengamos por santos mejores que los demás. Lo correcto es que nos dejemos convencer por el Espíritu de lo que somos, pecadores que claman con fe a Jesús diciéndole ten misericordia de nosotros que somos pecadores. La Misericordia es la máxima virtud. II-II, 30, 4 No mires nuestros pecados sino la fe de tu Iglesia. Sí, al llegar la plenitud de los tiempos, envió Dios a su Hijo, Gal 4, 4 para salvar a la humanidad y revelando su amor elige una pequeña y despreciada ciudad, en Belén Efratá y de allí no se alejó nunca de nosotros. Su presencia en cada ciudad, donde vivimos sigue estando, no tiene que ser fabricada sino descubierta y develada ya que somos nosotros los que debemos pedir a Dios la gracia de unos ojos nuevos, capaces de una mirada contemplativa, esto es, una mirada de fe que descubra al Dios que habita en nuestros hogares, en nuestras calles y plazas. Librarnos de la tentación de ligar la presencia de Dios sólo al templo, Jer 7, 4 el Creador habita en medio de su pueblo, camina con ellos y vive su vida. Su fidelidad es concreta, está cerca de la existencia cotidiana de sus hijos. Cuando Dios quiere hacer nuevas todas las cosas por medio de Jesús Periférico, no empieza desde el templo, sino desde el vientre de una pequeña y pobre mujer de su Pueblo. Esta elección nos muestra que Él no cambia la historia a través de los hombres y mujeres poderosos de las instituciones civiles y religiosas, sino de las mujeres de la periferia del imperio, como María, y de sus vientres estériles, como el de Isabel Francisco, 31.XII.19. Bernard McGin, The flowering of MysticismMen and Woman en the New Mysticism, 1200-1350

    Con el proceso de la politéia y de la fe, se dilata el corazón, y con la dulzura de un amor inefable se corre, por el Camino de los mandamientos. RB, pról.49 Viam mandatorum tuorum curram, quia dilatasti cor meum. ὁδὸν ἐντολῶν σου ἔδραμονὅταν ἐπλάτυνας τὴν καρδίαν μουדֶּֽרֶךְ־מִצְוֹתֶ֥יךָ אָר֑וּץ כִּ֖י תַרְחִ֣יב לִבִּֽLo que cumplía antes con recelo, ahora lo hará por cierta naturaleza y la  buena delectación de las virtudes. Lo cual el Señor se complacerá en manifestar,  por el Espíritu Santo, en su obrero purificado ya de sus vicios y pecadosRB, 7, 69-70. Sacramentarium Gelasianum, copia del año 750. Viam mandatorum dilatato corde curremus Por la acción mística del Otro Paráclito, se expande el corazón conciencia, se va superando la angustiosa estrechez del difícil camino de los inicios, al menos por períodos o alternancias, y se corre en gozosa epéktasis por la politéia y la fe, con la inenarrable dulzura de la caridad. La experiencia misteriosa de la Encarnación Pascual Trinitaria necesita mucho del sentir entender comunicar porque es un don para toda la Iglesia y el Mundo.

    Adhaesit anima mea post te, me suscepit dextera tua. דָּבְקָ֣ה נַפְשִׁ֣י אַחֲרֶ֑יךָ בִּ֝֗י תָּמְכָ֥ה יְמִינֶֽךָ Mi alma está unida a Ti y tu mano me sostiene. Sal 63, 9 El Dios Trino jamás se separa de nosotros, aun estando en pecado mortal, sino que nosotros nos separamos de Él. Mecum eras sed tecum no erat. Tú estabas conmigo pero yo no estaba Contigo, narra Agustín quien durante años huyó de Él envuelto en la vorágine de los deleites y las amarguras pecaminosos. Jesús Resucitado está siempre con nosotros, somos nosotros quienes por el drama del pecado nos convertimos a las creaturas y nos olvidamos del Creador. Esto no significa que a veces, muy unidos a Él por pura Gracia, sintamos su lejanía, su abandono, su Inasible Silencio y Trascendencia Infinita. Son los vaivenes de las desolaciones y las consolaciones del Espíritu, en las luchas contra los males, y por otras razones conocidas o desconocidas, para en el fondo beneficiarnos siempre. Dios no permite el mal sino para el bien, lo que no quita el adefesio y seriedad horripilante del mal en la naturaleza y en la historia. Quién podrá curar mi llanto ante el genocidio de Ruanda, hutus asesinando a un millón de tutsis entre abril y julio de 1994. El Verbo crucificado muriendo otra vez con ellos con El Grito en las tinieblas clamando al Padre. En una poesía el mártir Christophe hace que Jesús le diga. Te prevengo, estoy. Pasando a través de ti. Me adelanto. Te soplo el Camino. Te obligo en verdad. Te bautizo en mi Cruz. Ve. Toma mi Yo te amo. Sé Yo.

    Ya no podemos comer del árbol de la vida, como Adán y Eva en el paraíso terrenal. Árbol que restituía del normal desgaste y envejecimiento. Hoy se nos dice que son las proteínas que componen nuestra sangre las que anuncian cuando el cuerpo se despide de la juventud. Ocurre pasando los 34 años ya que ellas son los caballitos de batalla de las células del cuerpo. Cuando sus niveles relativos sufren cambios sustanciales, significa que nosotros también cambiamos. Además, unos científicos de Stanford descubrieron que la trayectoria del envejecimiento no es continua ni uniforme, sino con tres picos que marcan el inicio de tres etapas del ciclo vital, en la edad adulta la media y la vejez. A los 34, 64 y 78 años. Los límites de nuestro peregrinar nos apresuran por alcanzar una síntesis de sabiduría espiritual que será siempre limitada, pero nos ayudará con las Energías del Espíritu de la Verdad que vienen de lo Alto.

    Doroteo de Gaza, 505-565 hizo la suya, con docilidad discernidora de ancianos y jóvenes, cuales Barsanufio Juan Séridos Dositeo y tantos otros. Su síntesis todavía llega a los monjes inspirándonos. Insiste en que el itinerario va del amor a sí mismo o filautía hasta el amor y la filía o amistad con Dios y la totalidad de su creación. Agustín hacía lo mismo en De civitate Dei, amor de sí hasta el desprecio de Dios y amor de Dios hasta el desprecio de sí mismo. Con el renunciamiento y la humildad, sé misericordioso y manso, vencer la filautía y la voluntad propia, haciendo la Voluntad de Dios y de sus enviados, quienes nos ayudan en el proceso de crecimiento en la vida según el Espíritu. Si alguien busca de todo corazón hacer la voluntad de Dios, Él no lo abandonará jamás y lo guiará en todo. Camina por el sendero de los Dichos de los Padres de desierto, procurando la humildad, la obediencia, la paciencia, las lágrimas de compunción, el acusarte siempre a ti mismo, la ascesis, la pobreza, el desapego, sobre todo de tu ego con el intenso amor a Cristo. Notar la semejanza con su contemporáneo san Benito. Aunque no podamos por nuestras debilidades e incapacidades realizar esfuerzos penosos, por la compasión divina nos valdrá lo poco que hayamos hecho con humildad para estar entre sus santos. Participando en escuchar la Voz como lo hizo Jesús, alcanzando la Paz del corazón, también en los trabajos al servicio del cenobio. La Presencia de Cristo en todo es nuestra Paz. Pensemos en una circunferencia y un Centro. El círculo es el mundo, el Centro es Dios, y los radios las diferentes maneras de vivir de los hombres. Cuando los santos, deseosos de acercarse a Dios, caminan hacia el centro a medida que penetran en su interior se van acercando uno al otro al mismo tiempo que a Dios. Cuanto más se aproximan a Dios más se aproximan los unos a los otros. Y cuanto más se aproximan los unos a los otros, más se aproximan a Dios. Sucede lo contrario en sentido inverso, cuando dando la espalda a Dios no retiramos hacia el exterior, más nos alejamos los unos de los otros. Y cuanto más nos alejamos los unos de los otros más nos alejamos de Dios.

    Me vienen trozos de una homilía de Benedicto que me hizo llorar en el 2008 o 2009 pidiendo que Jesús me la hiciera plasmar. Arctius perstemus in custodia. Estemos de guardia de modo más intenso En la tradición del monacato sirio, los monjes se definían como los que están de pie, o sea vigilantesdesiderantes de la estrellas que nos embelesan y son intocables. Lo que entonces se consideraba tarea de los monjes, con razón podemos verlo también como expresión de la misión sacerdotal. El sacerdote tiene la misión de velar. Debe estar en guardia ante las fuerzas amenazadoras del mal. Debe mantener despierto al mundo para Dios. Debe estar de pie frente a las corrientes del tiempo. De pie en la verdad. De pie en el compromiso por el bien. Estar en presencia del Señor también debe implicar en lo más profundo, hacerse cargo de los hombres ante el Señor que, a su vez, se hace cargo de todos nosotros ante el Padre. Debe hacerse cargo de Cristo, de su Palabra, de su Vida Verdad y Amor. Nos haces dignos de servirte en tu presenciaCanon II Lo que el sacerdote hace en la celebración de la Eucaristía es servir, realizar un servicio a Dios y un servicio a todos los seres humanos. El culto que Cristo rindió al Padre consistió en entregarse hasta la muerte por todos, y el sacerdote debe insertarse en este culto, en este servicio. El servir forma parte ante todo de la correcta celebración de la liturgia y de los sacramentos en general, realizada con participación interior. Debemos aprender a comprender cada vez más la sagrada liturgia en toda su esencia, desarrollar una viva familiaridad con ella, de forma que llegue a ser el alma de nuestra vida diaria. Si lo hacemos así, celebraremos del modo debido y será una realidad el ars celebrandi. En este arte no debe haber nada artificioso. Si la liturgia es una tarea central del sacerdote, eso significa también que la oración debe ser una realidad prioritaria que es preciso aprender sin cesar y cada vez con mayor profundidad en la escuela de Cristo y de los santos de todos los tiempos. Dado que la liturgia cristiana, por su naturaleza, también es siempre anuncio, debemos tener familiaridad con la Palabra de Dios, amarla y vivirla. Sólo entonces podremos explicarla de modo adecuado. Servir al Señor significa también aprender a conocer al Señor en su Palabra y darlo a conocer a todas aquellas personas que él nos encomienda. Del servir forman parte otros dos aspectos. Nadie está tan cerca de su señor como el servidor que tiene acceso a la dimensión más privada de su vida. En este sentido, servir significa cercanía, requiere familiaridad. Esta familiaridad encierra también un peligro, el de que lo sagrado con el que tenemos contacto se convierta en costumbre. Así se apaga el temor reverencial. Contra este acostumbrarse a la realidad extraordinaria, contra la indiferencia del corazón minado por la acedia debemos luchar sin tregua, reconociendo nuestra insuficiencia y la gracia que implica el hecho de que Jesús se entregue en nuestras manos. Servir significa cercanía, pero sobre todo significa también obediencia. El servidor debe cumplir las palabras. No se haga mi voluntad, sino la tuyaLc 22, 42 Jesús en el huerto de los Olivos, resolvió así la batalla decisiva contra el pecado, contra la rebelión del corazón caído. Sí, el pecado de Adán consistió en que quiso realizar su voluntad y no la de Dios. La humanidad tiene siempre la tentación de querer ser autónoma, de seguir sólo su propia voluntad y de considerar que sólo así seremos libres, que sólo gracias a esa libertad sin límites el hombre será hombre. Pero así nos ponemos contra la verdad, dado que la verdad es que debemos compartir nuestra libertad con los demás y sólo podemos ser libres en comunión con ellos. Esta libertad compartida sólo puede ser libertad verdadera si con ella entramos en lo que constituye la medida misma de la libertad, si entramos en la voluntad o designio de Dios. Esta obediencia fundamental, que forma parte del ser del hombre, ser que no vive por sí mismo ni sólo para sí mismo, se hace aún más concreta en el sacerdote. Nosotros no nos anunciamos a nosotros mismos, sino a él y su Palabra, que no podemos idear por nuestra cuenta. Sólo anunciamos la Palabra de Cristo en la comunión de su Cuerpo. Nuestra obediencia es creer con la Iglesia, pensar y hablar con la Iglesia, servir con ella. También en esta obediencia entra siempre lo que Jesús predijo a Pedro. Te llevarán a donde tú no quierasJn 21, 18 Este dejarse guiar a donde no queremos es una dimensión esencial de nuestro servir y eso es lo que nos hace libres. En ese ser guiados, que puede ir contra nuestras ideas y proyectos, experimentamos la novedad, la riqueza del amor de Dios. Servirte en tu presencia. Jesucristo Sumo Sacerdote del mundo, confirió a estas palabras una profundidad antes inimaginable. Él, que como Hijo era y es el Señor, quiso convertirse en el Siervo de Dios que la visión del libro del profeta Isaías había previsto. Quiso ser el servidor de todos. En el gesto del lavatorio de los pies quiso representar todo su Sacerdocio. Con el gesto del amor hasta el extremo, lava nuestros pies sucios, con la humildad de su servir nos purifica de la enfermedad de nuestra soberbia. Así nos permite convertirnos en comensales de Dios. Él se abajó, y la verdadera elevación del hombre se realiza en nuestro subir con Él hacia su elevación en la cruz. Entrar en su vocación de Siervo sufriente de Yahveh. Heme aquí. EnvíameIs 6, 8 
    Busquemos tener cada vez más participación en la Sed de Jesús para dar el Espíritu del Mundo Nuevo. Jn 19, 28. 7, 37-39 Como busca la bebida. La hacienda que anda con sed. Así te busca mi alma. Señor, y te quiere verSal 42 en Salmos criollos, Mamerto Menapace Si no muestro un vislumbre de la Nueva Creación el sacerdocio ministerial pierde significado y eficacia. Paso el mes de enero como capellán en Hinojo, percibo a mi cuerpo entrando en un abierto deterioro geriátrico que acumula las fragilidades y enfermedades que lo acompañaron a lo largo de su peregrinar. El martes 14 murió Carlos Girardi de Olivos. Su esposa Ana María me había escrito pidiendo oraciones pues ya no podía mantenerse derecho ni su cabeza sobre sus hombros, la dejaba caer sobre su pecho e inclinaba su torso sobre sus piernas. Sentí que me describía. Lo que no hice en toda mi vida lo debo hacer ahora casi todos los días. Recostarme una hora, antes de Vísperas, con las piernas hacia arriba para aliviar el edema, mientras leo. Debido a los fuertes dolores, ya no puedo a veces sostenerme en pie. Gracias pues cada mañana te ofrezco el Cuerpo entregado y la Sangre derramada de Jesús con el cuerpo que me diste y nunca me perteneció. Fue siempre tuyo, vive dentro tuyo consagrado a Tu, y a mi inútil instrumento, Esposa la Iglesia Santa, en favor de las omnes animae qui Tecum et mecum semper sum.

    El obispo Morandi, secretario de la congregación para la doctrina de la fe, dio aclaraciones sobre las controversias generadas por algunas malas interpretaciones del estudio hecho por la Pontificia Comisión Bíblica titulado Qué es el hombreUn itinerario de antropología bíblica. El documento no se abre al divorcio, como señalan algunas personas, de manera distorsionada o instrumental quisieran. La Iglesia concede a los cónyuges unidos por el sacramento del matrimonio el derecho a separarse en ciertos casos particulares. Pero este hecho no ha significado nunca ninguna legitimación del divorcio, entre otras cosas porque un sacramento del matrimonio válido contraído permanece así y nunca puede ser anulado por ningún otro acto. Por el contrario, es diferente la hipótesis en la que el matrimonio se reconoce como nulo desde el principio. Este es el caso de los procedimientos para la declaración de nulidad del matrimonio. Sin embargo, a veces hay situaciones en las que la convivencia entre los cónyuges se hace en la práctica imposible por diversas razones. Es en estos casos en que se admite la separación física de los cónyuges y el fin de la cohabitación. Sin embargo, los cónyuges que están unidos por el sacramento del matrimonio no dejan de ser marido y mujer ante Dios y no son libres de contraer una nueva unión. La comunidad cristiana está llamada a estar cerca de estas personas y a ayudarlas a vivir con Cristo su situación. CEC, 1649 Además, desde hace algún tiempo, sobre todo en la cultura occidental, se han alzado voces de disensión respecto al enfoque antropológico de la Escritura, tal como la Iglesia la entiende y la transmite en sus aspectos normativos, todo ello se juzga a menudo como el simple reflejo de una mentalidad arcaica y condicionada por la historia. Sabemos que diversas afirmaciones bíblicas, en el ámbito cosmológico, biológico y sociológico, han sido consideradas poco a poco superadas con la progresiva afirmación de las ciencias naturales y humanas. En este sentido, algunos dicen que una nueva y más adecuada comprensión de la persona humana impondría una reserva radical sobre el valor exclusivo de la unión heterosexual, a favor de una aceptación análoga de la homosexualidad y las uniones homosexuales como una expresión legítima y digna del ser humano. Por otra parte, la Biblia diría poco o nada sobre este tipo de relaciones, que por lo tanto ya no deberían considerarse ilícitas desde el punto de vista moral. Se trata de una aproximación ideológica y parcial a la antropología. La institución del matrimonio, constituida por la relación estable entre marido y mujer, se presenta siempre como evidente y normativa en toda la tradición bíblica. No hay ejemplos de unión legal reconocida entre personas del mismo sexo. Por lo tanto no existe ninguna apertura a las uniones entre personas del mismo sexo, como algunos errando afirman. Diciembre 2019

    La curia romana cambiará siempre discerniendo la memoria del pasado, la percepción del presente y la nueva evangelización hacia el futuro, para servir mejor a toda la humanidad. La Iglesia está atrasada doscientos años. Por qué no se despierta. Tenemos miedo. Miedo en lugar de coraje. Sin embargo, la fe es el fundamento de la Iglesia. La fe, la confianza, el coraje. El amor supera la fatigaCardenal Martini en la última entrevista concedida pocos días antes de su muerte Formas históricas del cristianismo irán transformándose. Las actuales no anuncian su desaparición, pero sí el final de una de sus figuras y el comienzo de otraMichel de Certeau Ya no estamos más en la cristiandad. Hoy no somos los únicos que producen cultura, ni los primeros, ni los más escuchados. No estamos ya en un régimen de cristianismo porque la fe, en gran parte de Occidente, ya no constituye un presupuesto obvio de la vida común, incluso es negada y burlada. Tenemos necesidad de un cambio de mentalidad pastoral, que no quiere decir pasar a una pastoral relativista. Un cambio de mentalidad que parte de la constatación de que la vida cristiana en realidad es una peregrinación. Un camino no sólo geográfico, sino sobre todo simbólico. Una invitación a descubrir el movimiento del corazón que por paradoja necesita partir para poder permanecer, cambiar para poder ser fiel. Un rasgo distintivo de la misión cristiana es aquel de hacer de facilitador, y no de controlador de la fe. Facilitar hacer más fácil, no poner nosotros obstáculos al deseo de Jesús de abrazar, sanar y salvar a todos. Siempre conscientes de que sin Jesús no podemos hacer nada. Francisco a la curia romana, 2019

    Hay un área álgida a estudiar más por el sínodo de los obispos, el servicio al desarrollo humano integral, la academia de ciencias sociales, la promoción de la nueva evangelización, y los teólogos peritos en los problemas socioeconomicopolíticos. Se trata de si vamos hacia una eclipse del reformismo, o sea tratar de mejorar, el nuevo capitalismo humanizado de Juan Pablo, dejando de lado el capitalismo salvaje. O considerar al neoliberalismo como un sistema inapropiado que amenaza a la humanidad por la producción sistemática y permanente de exclusión, con el descarte de millones de personas y la destrucción del medio ambiente. Nos empujan cambios radicales a realizar ya para evitar desastres pergeñados en Joker o Guasón de Todd Phillips. 2019 Para S. Zizek la película es imagen del nihilismo social, entre miserias y psicopatías, destinada a despertarnos. No quedarnos sólo con la fraternidad enferma sino atarla al antropoceno con las consecuencias negativas que la actividad humana ha tenido en los ecosistemas de nuestro Planeta.

    Por supuesto lo socioeconomicopolítico cual realidad temporal goza de autonomía tecnocientífica, y la Iglesia no tiene el monopolio de la interpretación de esa realidad complejísima ni propuestas con recetas concretas. Pero puede aconsejar e iluminar ciertos procesos de cambios desde su doctrina social. Lo que los católicos nunca debemos hacer es pensar que sólo con el Evangelio, que por supuesto no da respuestas tecnocientíficas que la Iglesia respeta y estudia, podemos meternos con lo socioeconomicopolítico. La economía de mercado o empresarial no ha sido todavía desaconsejada por la doctrina social de la Iglesia. No existe una socioeconomiapoliticacultural cristiana, como no existen tecnociencias o filosofías cristianas. Pero todas pueden recibir luces de la Revelación, integrando cuando es posible fe y razón. Compendio de la doctrina social de la Iglesia. Centesimus annus. Caritas in veritate. Laudato Si’Pacto social de Francisco que convoca a  economistas y emprendedores, académicos y expertos en ciencias económicas que están comprometidos en el mundo a practicar una economía diferente, que da vida y no mata, incluye y no excluye, humaniza y no deshumaniza, cuida la creación y no la despoja.

    La enseñanza de Jesús y su Iglesia sobre el Reino de Dios no es un libro de autoayuda ni una receta para que arregle todas las problemáticas socioeconomiapoliticaculturales y todos seamos felices con un Happy End. El Reino en Plenitud ya es Cristo, y termina torturado y ejecutado, en esta Dimensión terrenal. Será algo similar para su Iglesia y el Mundo en el Apocalipsis, para la pascua de la Transfiguración Final. Es necesario pasar por muchas tribulaciones y persecuciones y así entrar en el Reino de Dios. Hech 14, 22. J.L. Ruiz de la Peña, El Último Sentido. Una introducción a la escatología
    Nunca lo olvides, sin convertirte en profeta de calamidades sino de la Bienaventuranza Esperanza. Antes de la Venida del Resucitado para resucitar la totalidad espiritual y material de la realidad, con todos sus ángeles y santos, la Iglesia deberá pasar por una prueba final que sacudirá la fe de numerosos creyentes. La persecución que acompaña su peregrinación sobre la Tierra develará el misterio de la iniquidad bajo forma de una impostura religiosa que presumirá dar una solución aparente a todos sus problemas por medio del anticristo, al precio de la apostasía de la Verdad. Éste propondrá un pseudomesianismo en que el ser humano se autoglorificará colocándose en lugar de Dios, de su Mesías enviado en la carne sufriente con la acción del Espíritu del Encuentro. Así la Iglesia sólo entrará en el Reino Futuro siguiendo a Jesús en su muerte y resurrección. Nunca habrá triunfo histórico para Ella. Sino sólo una victoria directa de Dios sobre el horripilante último desencadenamiento del mal, que tomará la forma de Juicio Final, luego de la última sacudida cósmica de este mundo donde el tiempo ha plegado sus velas. Juicio que develará en sus últimas consecuencias lo que cada uno haya hecho o haya dejado de hacer durante su vida terrena por el Dios del Silencio. Escondido entre los hermanos más pequeños y la ecología descuidada, aunque no se hayan dado ni cuenta. Justos o injustos le preguntarán a Jesús. Cuándo estabas en la cárcel y te visitamos. Cuándo te vimos hambriento y no te dimos de comer. Lo que con ellos hicieron lo hicieron Conmigo. Mt 25. CEC, 1038-1041 y 675-677 A Ti, Señor, han visto. Cuando se han mirado el uno en el otro. A Ti ha visto tu Madre en el discípulo. Y a Ti ha visto el discípulo en tu Madre. A Ti, Señor, siempre vieron los contemplativos en un espejo. Ellos ponen de manifiesto que también nosotros. Cuando nos miramos unos a otros. Podemos verte a Ti, Salvador nuestroBeato C. Lebreton