domingo, 27 de julio de 2014

204. Contemplación y Enseñanza Social de la Iglesia, Sal 113
   
    Desde la salida del sol hasta su ocaso, alabado sea el Nombre de Yahveh. Él está sobre todas las naciones. Se inclina para mirar el cielo y la tierra. Levanta del polvo al desvalido. Alza al pobre del estiércol, para hacerlo sentar entre los líderes de su Pueblo. Y hacer también sentar a la mujer estéril en su hogar como madre feliz de hijos. El salmo tiene relación con el Cántico de Ana, 1 Sam 2, 1-10 y el Magnificat de María. Lc 1, 46-55  Inicia uno de los Tres Hallel. Aleluyáticos, 113-118 que se cantaban sobre todo en Pascua. Trascendencia amorosa de Dios que cuida de los desvalidos, pobres y estériles.    
    La Enseñanza social de la Primera y Nueva Alianza no es una ideología o un código de laudables conductas ciudadanas. Es el Proyecto de Dios para arreglar un Mundo roto. Es una teología que surge del Amor Infinito de la Trinidad que Sale al Encuentro de hombres pecadores. Así habla Yahveh. Ustedes venden al justo por dinero y al pobre por un par de sandalias. Pisotean sobre el polvo de la tierra la cabeza de los débiles. Desvían el camino de los humildes. anawim El hijo y el padre se acuestan con la misma joven. Se tienden sobre ropas tomadas en prenda. Y beben en la Casa de Dios, el vino confiscado con injusticia. Por eso los voy a aplastar. Am 2, 6-16 Sin esta Gratuidad incondicional del Amor en la Verdad que nos llena de Vida en abundancia, la Justicia es ininteligible. Surge de la contemplación de la Trinidad, y de sus criterios de acción en la historia de la salvación. Un saber iluminado por la fe, en diálogo cordial con todas las filosofías, ciencias culturas y pueblos, del que se deriva una ética social de la conducta humana, ecológica y mundial. Sin este Encuentro del Amor de Jesús con el amor del hombre, en comunión con toda la humanidad y el universo, no hay Enseñanza Católica sino sectorial. Allí no hay fe unida a la razón, a las ciencias y al oído en el Pueblo. Contemplativo del Verbo y contemplativo de los Pueblos. Privilegiando a los pobres.
    No hay rama de la teología que necesite más del Principio de Totalidad que la Enseñanza Social de la Iglesia. Si me atrevo a abordarla, no en sus innumerables cuestiones, sino cual minúscula Introducción para monjes y laicos comprometidos con el monacato, es debido a las circunstancias de ser un anciano que ha vivido en 7 países, viajado a 34, y desde hace 54 años dialoga con toda clase de personas. A pesar de ser introvertido y silencioso jovial, eso le permite, con sus limitaciones repletas de Dissected Files searching for what lies Below, without Cortexiphan Fringe, orar estudiar tomar distancias y sacar conclusiones con lentitud. Nuestros cuerpos son bodegas donde nuestras psiquis adquieren sabiduría y madurez. Como vino en antiguos toneles. Nuestras almas sazonan con mayor profundidad cuando envejecemos y nuestros cuerpos empiezan a mostrar roturas. Mucho más que cuando están enteros y jóvenes. Del mismo modo hay un camino de honda maduración en los enfermos. Camino que permanece escondido a los que gozan de buena salud. J. Hillman, La fuerza del carácter De todas formas, un inexperto píxel al lado de los gigantes cual Hillary Clinton con sus  incontables Memorias en Living History. La teología no se limita a ser un discurso sobre la fe definida o el Magisterio de la Iglesia. No es repetición fundamentalista. Es un carisma distinto, lugar creativo de la autointeligibilidad humana. Un modo de vivir, conocer y liberarse, abierto a la Palabra y el Espíritu hacia la Casa del Padre en comunión orante. Hay enormes enseñanzas sociales expresadas en lenguajes teológicos diferentes y complementarios.

    Se cuenta que, hace mucho tiempo, los hombres pensaban sin cesar en la muerte. No disfrutaban de lo que comían, ni de lo que bebían, obsesionados día y noche con la idea de la muerte. Es que desconocían el amplio mundo de las ideas. Los pensamientos que nos preocupan hoy no existían en aquella época. A medida que ellos envejecían, sus cuerpos iban quedando cada vez más descarnados. Es sabido que las reflexiones sobre la muerte consumen la carne del hombre. Y cuando morían los gusanos no encontraban nada para comer en las tumbas de los seres humanos. Por ello decidieron quejarse ante el Señor Dios. Le dijeron. Cuando nos creaste, Dueño del Universo, nos dijiste que comeríamos carne. Pero los hombres mueren delgados como tornillos. No podemos alimentarnos de sus esqueletos. Tienen razón, queridos gusanos, les dijo el Señor Dios. Voy a pedir consejo a los ángeles. Éstos reflexionaron sobre la queja de los gusanos. Llegaron a la conclusión de que tenían toda la razón. Que habían sido creados para comer carne de cadáveres bien gordos. Dios escuchó entonces la queja de los gusanos, e introdujo el dinero en el mundo. Y el hombre se puso a comprar, y a vender por doscientos lo que había conseguido por cien. Se apasionó por la compra y la venta, hasta olvidarse de la muerte. La preocupación se volcó en el dinero. Estudiar y trabajar para ganar dinero. Salir para gastar dinero. Hacer guerras para tener más dinero. Vender lo que fuese y a quien fuese para conseguir más dinero. Y con los dineros ganados, el hombre empleaba la mitad en comprar mercancías y la otra mitad en adquirir alimentos. Y el hombre comía y engordaba. Se divertía y engordaba. Compraba de todo y engordaba.  Al mismo tiempo el alma se encogía, se disolvía, y en muchos casos desaparecía. Tanto, que en la actualidad, cuando muere un hombre, los gusanos se aplauden y dan gracias a Dios por su gran misericordia. Ben Zimet, Cuentos del pueblo judío
    Es tanto el poder del dinero, que te desvía, y hasta te quita la fe. El dinero idolátrico puede enfermar el pensar tu fe, y hacerte tomar un sendero equivocado. Palabras ociosas, discusiones inútiles, envidias, litigios, maledicencias, sospechas infundadas, conflictos entre hombres corruptos que consideran la religión como una fuente de ingresos. Soy católico voy a Misa, porque eso me da estatus. Me miran bien. Luego yo tengo mis negocios, soy amante del dinero. Si eliges el camino del dinero al final serás un corrupto. El dinero te seduce y te hace resbalar hacia la perdición. Jesús es tajante en este tema. No puedes servir a Dios y al dinero, al demonio mamona. No se puede, o el uno o el otro. El dinero te ofrece un cierto bienestar al inicio. Después te sientes importante y viene la vanidad. Y de la vanidad se pasa al orgullo y a la soberbia. Son tres escalones, riqueza, vanidad y orgullo. San Ignacio El diablo toma ese camino para tentarte. La riqueza, para sentirte suficiente. La vanidad, para sentirte importante. El orgullo y la soberbia para separarte de Dios. Al servir al dinero se peca de idolatría. Porque el dinero se convierte en un ídolo y tú le das culto. Por esto Jesús dice que no se puede servir al ídolo dinero y al Dios viviente. Los Padres de la Iglesia del siglo III, decían algo muy fuerte. El dinero mal usado es el estiércol del diablo. Porque nos hace idólatras y envenena nuestra fe. Nos hace maníacos de cuestiones ociosas y nos aleja de los pobres. Nos corrompe. Papa Francisco, Homilía en Santa Marta, 20, IX, 2013

    La salvación cristiana es una liberación integral del hombre, liberación de necesidades y posesiones inútiles. Porque la raíz de todos los males es la avaricia, y algunos al dejarse llevar por ella, perdieron la fe.1 Tim 6, 10 Quien desarrolla una actividad económica y posee bienes, debe considerarse administrador de cuanto Dios le ha confiado. Las riquezas son un bien que viene de Dios, quien lo posee debe hacerlo circular, de manera que también los necesitados puedan gozar de él. El mal se encuentra en el apego desordenado a las riquezas. En el deseo de acapararlas en exclusividad. Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 328-329
    Seamos o no conscientes siempre estamos haciendo teología. La mayor amenaza del mundo globalizado no está en que uno crea o no crea en Dios, sino en el Dios en que uno cree. Dios es aquello a lo que le ofrecemos la devoción del corazón, lo que más valoramos y por lo que más nos sacrificamos. Uno de los retos fundamentales de los seres humanos no es el ateísmo, sino la idolatría. Ésta contribuye al desorden social actual, y el camino hacia la paz incluye un reto a la conversión al verdadero Dios. La causa más profunda de la injusticia global está vinculada a un error teológico y antropológico llamado moneyteísmo. Se identifica con la idolatría  del dinero y del capital. Se expresa en la adoración de los bienes de consumo del mercado, y se practica en rituales financieros. Los salarios de un CEO, Chief Executive Officer de las multinacionales, son 500 veces mayores que las de sus trabajadores. Las personas se miden por su capital neto, por las propiedades que acumulan y por sus ingresos, no por sus valores humanos o por la profundidad espiritual que ellas tienen. El dinero es está en el centro, no la persona. D.G. Groody, Globalización, espiritualidad y justicia


    América latina ha pasado por tres etapas. En los años 60 la teología fue impactada por la realidad de la pobreza masiva, escandalosa e injusta, hasta la pobreza extrema de cadáveres vivientes. En los años 70 emergió en primer plano la realidad de los oprimidos, discriminados y de las víctimas. Se superó el concepto sólo economicista de pobreza y se tomó consciencia de los indios, negros, mujeres y torturados por los sistemas represivos de Seguridad Nacional. A partir de los 90, se impone una nueva categoría, los excluidos. Una creciente mayoría queda excluida de la economía de libre mercado. En cada país se yuxtaponen dos naciones, los incluidos y los excluidos. Existe la nación oficial, organizada, integrada, conducida, financiada, en proceso de desarrollo y, por otro lado, la nación no oficial, informal, desorganizada, desintegrada, sumergida en la violencia y el caos, sin ninguna capacidad de diálogo, migrantes que no saben ni el idioma. La teología pasa de la pobreza espiritual a la teología de los pobres y su Misterio, como pecado social, con su raíz  idolátrica y la cristología y eclesiología del pobre. Pablo Richard e Ignacio Ellacuría
    Como decía Hegel, toda vida razonable debe tener una conclusión. El tiempo sin conclusión lleva a la depresión, al vacío, la angustia y la locura. No tiene mensaje cierto, ni sentido pleno. Entonces queremos que pase cuanto antes, y nos llega la aceleración del zapping. No nos detenemos en nada. Entramos en el vértigo de lo siguiente. Todo pasa rápido. No hay razón para cerrar los ojos, detener la mirada y Contemplar desde el Silencio. Así es la sociedad de la hiperinformación que nunca concluye. Estamos ocupados con una noticia y ya viene otra que nos borra la anterior. La información es exponencial. Pero no ofrece una unidad de sentido ni conclusión. Las parábolas de Jesús llevan a una conclusión. Son relatos que inician y concluyen. Quien sigue a Jesús aprende el arte de concluir la torre que comenzó a edificar. Vivir es aprovechar el tiempo con ritmo y cadencia de música y unitotalidad. Ese es el espacio tiempo que nos llena y regenera. En cambio el tiempo acelerado, frenético, acumulativo nos vuelve caóticos, desmenuzados, desestructurados y contradictorios. La franja de un relato es estrecha. No se relata todo. Lo importante no es ofrecer una información excesiva, sino seleccionarla y formar unidades de sentido con una sana conclusión. J. García Paredes Agradezco a la Iglesia Jerárquica que nunca me permitió ser un teólogo de escritorio, sino un pequeño discípulo misionero contemplativo, monje y pastor, simple Enciclopedia de la ignorancia, con mucho olor a Jesús a ovejas y a tierra.

    La Doctrina social se puede describir como el Evangelio de nuestra vida humana en comunión, o relación ética, con Dios los hermanos y el cosmos, personas responsables en sociedad para servir. Su fundamento está en la Revelación que nos da la Tradición, la Biblia y el Magisterio junto a los teólogos filósofos científicos y el Sensus Fidei del Pueblo de Dios. Es el anuncio de la visión global de cada persona y de la humanidad arraigada en la Trinidad y en este universo a la luz de Jesucristo, Símbolo actuante y concreto de toda la realidad. Y la denuncia, dado el pecado, de las injusticias y las violencias que destruyen la convivencia en la Civilización de la justicia, la paz y el amor. Esta denuncia es juicio y defensa de los derechos y deberes ignorados y violados, en especial de los pobres miserables descartados y débiles. La Iglesia no se hace cargo de la vida en sociedad bajo todos sus aspectos sino con su competencia propia que es la proclamación de Jesús Resucitado. Él vuelve a poner en pie todo lo caído. La misión propia que Cristo confía a su Iglesia no es de orden político, económico, social, militar o cultural, sino de liberación y religación espiritual con Dios Padre Verbo y Paráclito. De esta misión derivan luces y energías que consolidan la comunidad familiar, nacional e internacional según la Ley del Espíritu que da la Vida. A la Iglesia no le competen cuestiones técnicas ni proponer sistemas o modelos de organizaciones sociopoliticoeconómicos. La centralidad del Misterio de Cristo, en su Enseñanza social, no debilita ni excluye las verdades de la razón, de las ciencias, y de la consciencia de cada uno, y por lo mismo no la priva de su plausibilidad racional y destinación universal al diálogo con todos los hombres. Las aportaciones ciertas y pluriformes de todo el Pueblo de Dios, y de todos los Pueblos, pueden ser asumidas por el Magisterio. Así desde León XIII con su Rerum Novarum de 1891, ante la revolución industrial y la clase trabajadora. La Enseñanza pasa a ser Doctrina social promulgada por el Papa y los obispos en comunión con él. Ésta no constituye un cuerpo fijo e inmutable, sino un entender progresivo en un mundo dinámico en incesantes cambios, desequilibrios e interrogantes. Al Papa y los obispos les compete discernir cuestiones, movimientos y teologías sociales. Como la Unión de Católicos Mexicanos, Asociación secreta o reservada, fundada en1915 por el obispo Luis María Martínez, a la que se oponía Rafael Guízar y Valencia. Pío XI decretó su extinción en 1929. O la Teología de la Liberación enriquecida con dos documentos Libertatis Nuntius, 1984 y Libertatis Conscientia, 1986. La Doctrina social implica responsabilidades serias con la organización y funcionamiento de la sociedad, obligaciones pedagógicas, administrativas, políticas y económicas. Éstas pertenecen no a los sacerdotes, monjes y religiosos, sino a los fieles laicos. De ahí que la Doctrina social debe entrar como parte integrante del camino formativo del laico, solo o asociado. Todos sin embargo, en nombre del desarrollo integral de la persona humana, en nombre de Dios Creador Camino y Fin del hombre, son destinatarios de la Doctrina social, dirigida no sólo a los cristianos sino a todos los seres humanos. Esta Doctrina es un Taller siempre abierto y en salida hacia la edificación de la Civilización del amor en la solidaridad, la justicia, el encuentro, la inclusión y la paz. Dios le ofrece al hombre la posibilidad real de encontrar, a veces de manera confusa oscura y dramática, cuál es el sentido de su vida, de su acción y de su muerte, superando el mal y alcanzando el Bien. La Transfiguración de la persona, en su Conformación con Cristo, es el presupuesto esencial, en conversión individual y compromiso con la comunidad y la ecología, de la Praxis social católica. Lograr el bien de todos y de cada uno. Todos responsables de Todos.

    Cada fiel, clérigo consagrado o laico, verá con prudencia qué debe o puede asumir. Lohfink en Jesús de Nazareth, describe cómo en los Evangelios la gente se relaciona con Jesús de diferentes maneras. No todos fueron apóstoles, no todos fueron discípulos y no todos los que contribuyeron a la causa de Jesús lo siguieron cual aquellos. Diferentes individuos tuvieron su propia manera de conectar con Jesús. Podemos decir que los Evangelios son conscientes de una gran variedad de formas de participación en la causa de Jesús. Estaban los Doce. Había un círculo de 72 y otro más amplio de discípulos. Multitudes que participaban de formas muy variadas. Partidarios encontrados con diferentes puntos de vista. Residentes que pusieron sus casas u otros bienes a su disposición. Gente que ayudó en situaciones particulares. Beneficiarios que gustaban de la enseñanza de Jesús, y por esa razón no hablaron contra él. Estas líneas estructurales no son accidentales. En la iglesia actual podemos encontrar todas estas formas y muchas otras. Es un modelo complejo, la apertura de los Evangelios debe avisarnos contra el hecho de juzgar a la gente como falta de fe si no es capaz de adoptar el modo de vida de los apóstoles, de los 72, o de las multitudes que lo seguían. Jesús nunca lo hizo. La iglesia contiene también una gran variedad de más o menos comprometidos. Gente que practica sólo en ocasiones, gente que acepta algunas de sus enseñanzas y no presta atención a otras. Invitados que visitan nuestras comunidades. Gente que no se compromete pero simpatiza con la iglesia y le ofrece variadas formas de apoyo. Gente que se une a Dios de modos más privatizados, esos que son espirituales pero no se institucionalizan. Esa gente está alrededor de Jesús y  eso es muy importante. Debemos ser cuidadosos en la manera de entender esta variedad. No significa que haya compartimentos piramidales con dignidades honoríficas entre los discípulos misioneros. O donde unos son llamados a una santidad más alta y otros a una más baja, como si el Evangelio se aplicara sólo a algunos. La Iglesia nunca puede ser dividida en perfectos y menos perfectos, en mejores y peores expertos, en totales y parciales participantes. El Evangelio completo se aplica a cada uno, como hace la invitación de Jesús a la intimidad con él. Jesús no llama a la gente según un más y un menos. El discipulado cristiano no admite niveles, grados, estratos gnósticos diferentes. Es como una relación de amor. Cada uno elige a qué hondura desea llegar. Algunos llegan más hondo que otros, aunque cada uno entienda que llega a lo que más pudo llegar. Siempre habrá una gran variedad en la profundidad y participación. Cada uno de nosotros tiene su propia historia de ser agraciado y herido, formado y deformado, y así todos llegamos a la adultez con diferentes capacidades para ver, entender, amar, aceptar el amor y entregarnos a alguien o algo más allá de nosotros. Ninguno es completo ni maduro en plenitud. Todos somos limitados en lo que podemos hacer. De ahí que de nadie se espera que responda a algo que está fuera de su esfera de posibilidad. Así nos reunimos alrededor de Jesús de diferentes maneras, dependiendo de nuestra capacidad de entender y entregarnos. Jesús no tuvo problema con esto. En su visión, no existía una categoría de discípulo de cafetería o light. Todos, siervos inútiles, estamos alrededor de Jesús a nuestro propio modo. En el Pueblo de Dios cada cual tiene su servicio. No nos juzgamos unos a otros. Conozco un matrimonio pobre con catorce hijos que, que vive cerca de este monasterio, y colabora en la pastoral mucho más que yo. El Donatismo acecha. Nadie puede excluir a los pecadores o menos perfectos de la Iglesia. No quedaría ni uno.

    No hay civilización del amor, solidaridad, inclusión, encuentro y paz, obra de la justicia, sin una búsqueda apasionada por la paz. Es un terrible peso que Dios ha cargado sobre nuestras espaldas. Y una maravillosa vocación que nos has dado. No hay paz sin una feroz decisión de vivir en paz. La paz necesita orantes profetas y constructores. Construirla con sabiduría sobre variados pilares. La justicia legal distributiva y conmutativa, la veracidad, la fraternidad, la libertad y el amor a Dios Padre y a nuestros enemigos. La paz es una obra en construcción abierta a todos y no sólo a especialistas, los sabios, los estrategas, los economistas y políticos. Es una responsabilidad universal. Pasa a través de los pequeños actos de cada día. Es a través de su propia manera de respetar con amabilidad a los demás que los hombres hacen su elección a favor o en contra de la paz. Lo que se hace orando por la paz, debe ser proclamado y construido hoy. Prescindir de la oración por la paz sería tan suicida como prescindir de su anuncio y de su construcción por la diplomacia, el diálogo, y la defensa legítima que pone límites a los malos y delincuentes, sin dejar de hacer el bien a nuestros enemigos, y volver a incluirlos en la sociedad.
    Sí, bendice a mis enemigos, Jesús. Yo también los bendigo y no los maldigo. Ellos me han llevado a tus brazos más que mis amigos. Mis amigos me han atado a la tierra, mis enemigos han hecho que me desprenda de ella y han destruido mis aspiraciones en este mundo. Mis enemigos han logrado que sea un extranjero y forastero en esta tierra. Bendice a mis enemigos, Jesús. Yo también los bendigo y no los maldigo. Ellos han confesado mis pecados ante todos en mi lugar. Me han castigado cuando yo he dudado en hacer penitencia. Me han atormentado, cuando he intentado huir de los sufrimientos. Me han reprendido, cuando yo me envanecía. Me han escupido, cuando yo estaba lleno de arrogancia.
    Cuando me he creído sabio, me han llamado necio. Cuando me he colocado por encima de los hombres, se han burlado de mí como si fuera un enano saparrastroso. Cuando he querido ser el primero, me han postergado. Cuando he pensado que podía dormir tranquilo, me han despertado de mis sueños. Cuando he intentado construirte una Casa, la han derruido y me han echado de ella. En verdad, mis enemigos me han liberado de falsas ataduras y han hecho que alargue la mano para tocar la orla de tu túnica. Mis enemigos me han enseñado lo que casi nadie sabe, que el único enemigo que tiene un hombre es él mismo. Uno sólo odia a sus enemigos cuando no se da cuenta de que no son enemigos, sino amigos crueles. Me resulta muy difícil decir al fin de mi vida, quién me ha hecho más bien y quien me ha hecho más mal en este mundo. Si mis amigos o mis enemigos. Por lo tanto, bendice, Jesús, tanto a mis amigos como a mis enemigos. Nikolái de Zica, obispo serbio ortodoxo
    
    Según el informe elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, en el mundo hay 1.200 millones de personas que viven con menos de U$S 1,25 al día y las fortunas de las 85 personas más ricas del mundo, sumadas, equivalen a todo lo que ganan los 3.500 millones de los más pobres juntos. En 91 países en desarrollo, 500 millones de personas siguen siendo pobres y cerca de 800 millones sufren el riesgo de regresar de nuevo a esa situación. En el caso de América Latina y el Caribe señala que el 6,7% de la población es pobre y un 9,5% está cerca de esa situación. Este estudio anual mide factores como el progreso de las personas en ámbitos de salud, educación, seguridad e ingresos económicos. Asia meridional es la región que cuenta con una cantidad mayor de población pobre, unos 800 millones de personas y otros 270 millones están próximos a ese umbral. El informe refleja que la pobreza, en general, sigue disminuyendo, aunque casi 1.500 millones de personas en los 91 países en desarrollo analizados siguen siendo pobres y cerca de 800 millones sufren el riesgo de regresar de nuevo a esa situación si se producen situaciones de crisis. El documento refleja además que la desigualdad en los ingresos ha aumentado en varias regiones, incluido en países con un elevado grado de desarrollo, y América Latina y el Caribe mantiene la cota más alta a nivel mundial en ese aspecto. También persiste, en general, un alto nivel de inequidad en educación. Los índices más altos de desarrollo en el mundo lo registran cinco países europeos, entre un total de 187. Ellos son, en su orden, Noruega, Suiza, Países Bajos, Alemania y Dinamarca. Dos naciones de Oceanía, Australia y Nueva Zelandia, dos de América del Norte, Estados Unidos y Canadá, y un asiático, Singapur, son los países que complementan la lista de los 10 primeros. Los 10 países que cuentan con los índices más bajos de desarrollo se encuentran en África. Radio Santa Fe, Bogotá, 25, VII, 2014
    Con los ojos en la Familia de Jesús María y José, todos juntos en comunión, sin odios ni violencias, construyamos un inicio de Mundo sin miserables. La Misa es cosa de Pastoral Social, la comunicación de bienes es su ideal. Sobre estos bienes de que disponemos grava una hipoteca social que busca el bien de la comunidad. El momento central de la Eucaristía es de Pastoral Social. Carlos Suárez Cázares, obispo auxiliar de Morelia, 12, VII, 2014 Comencemos por promover a nuestros prójimos ninguneados y sus pequeños jardines excluidos. Oremos Leamos Trabajemos con el Principio Galilea, la identificación de Jesús con los marginados. Galilea no era ningún centro. El poder político estaba en Roma, el cultural en Alejandría, el intelectual en Atenas, el religioso en Jerusalén. El Principio Jerusalén, Jesús se enfrenta con el mal. Y el Principio Resurrección, Jesús pone en pie la Vida a partir de la muerte, Yahveh levantó al Pobre del estiércol, y nos manda reencontrarlo en Galilea. Virgilio Elizondo, Galilean Journey

                                                                                                              


jueves, 17 de julio de 2014

203. 집으로 Jibeuro, The Way Home. Parábola de Silenciamiento, 2 Cor 13, 11-13

    La Gracia del Señor Jesús, el Amor del Padre, y la Comunión del Espíritu,  esté en medio de ustedes. Cuando confesamos la fe viva. La celebramos en la liturgia. Y la testimoniamos con el seguimiento de los mandamientos y bienaventuranzas de Jesús. Entonces nos damos cuenta que no podemos vivir sin orar, que es mantener la alianza, la comunión, la respuesta a la Trinidad, Amante Amado y Amor, que nos busca sin cesar. Toda nuestra vida se vuelve una relación con el Padre, el Verbo y el Espíritu, y desde Ellos y hacia Ellos con todos los ángeles, los hombres y el cosmos. La oración vocal, meditativa o contemplativa es siempre un entrelazarnos en una relación viviente de los hijos con nuestro Padre, de los hermanos con nuestro Hermano Jesucristo, de los que gemimos con el Gemido Inefable del Espíritu que reza en nosotros.
    La oración cristiana es una relación viviente entre la Trinidad y cada ser humano en Cristo. Es acción de Dios y acción del hombre en sinergía. La iniciativa la tiene el Amor de Dios que nos busca, dónde estás. Gn 3 Y luego de nosotros que respondemos a esa búsqueda diciéndole, aquí estamos, ya no nos escondemos ni tenemos miedo por estar desnudos de Ti, revestidos de Cristo te decimos en el Fuego del Padre de los pobres, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
    Quién quiera que el cristianismo sea un anuncio banal y barato de felicidad hagas lo que hagas, destruye la Ilimitada Seriedad de comunión con la Trinidad. Quien piense que en mi opción por Cristo no debe estar presente la Justicia y la posibilidad de la condenación eterna, lo falsifica. Quien come y bebe sin discernir el Cuerpo y la Sangre de Cristo sin examinarse a sí mismo, come y bebe su propia condenación. 1 Cor 11, 28-34 Así, orar sin intermisión es una necesidad vital. Si no nos dejamos llevar por la Libertad del Espíritu caemos en la esclavitud el pecado. No puede haber ningún motivo para tenerle miedo a la Infinita Bondad de Dios. Sólo el temor reverencial ante sus Proyectos y el misterio del mal. Que nos castigue por nuestra pertinacia en el pecado. O nos veamos separados de su Educación Escucha y Silencio que jamás nos abandona.
    Jibeuro es un meditado pausado y sabio poema coreano a la reconciliación de los extremos de la sociedad, los niños con los ancianos, y con la ecología. De la frenética ciudad de Seúl con la nada silenciosa de una casa aislada en la montaña. De la madre tierra o amor mudo con sus díscolos humanos. Escrito y dirigido por la directora Lee Jeong hyang. *1964 Estudió en la Universidad de Sogang literatura y filología francesa, y se licenció en la Academia Coreana de Cine. Éste es su segundo largometraje presentado el 2002. Sin actores profesionales en el reparto y con un presupuesto reducido. No es que quisiera hacer un documental. Sólo gente que hubiera vivido en esos remotos pueblos podría evocar la sensación deseada. Mientras buscaba a quien interpretara a la abuela, pensó que una vez que hubiera encontrado el lugar para rodar, la abuela estaría esperando. Fue como una premonición psíquica. Cuando se decidió por Jeetongma y se dirigió a él, allí estaba Kim Eul Boon.
    Las circunstancias de la mamá de Sang Woo, se han vuelto extremas. Divorciada de su marido, ha perdido la tienda que poseía y busca trabajo. Esta situación precaria la lleva a pedirle a su madre de 77 años que cuide de su hijo por los tres meses de verano. Éste tiene entre 7 y 9 años pues escribe bien. La señora vive en una casa destartalada en la montaña, alejada de la pequeña aldea, en completo aislamiento. Es muda, vieja y llena de arrugas cual pasa de uva, con una cifosis aguda que la dobla por la mitad. Analfabeta, ve muy poco. Nunca había conocido a su nieto, pero acepta que se quede con ella.
    Él está herido en el núcleo familiar. Es consentido, malcriado, machista, mandón, caprichoso, chantajista, apegado a los videojuegos y al pataleo berrinchudo. La trata de tonta, la empuja, la desprecia por sucia e ignorante. Le orina y esconde sus suecos. Le saca la hebilla, con la que sostiene el rodete de sus canas, para ir a comprar baterías, que en la Ranchería nadie tiene. Ella no es mojigata o sentimental. Está bien jalada a la madre tierra, su cuerpo y su psiquis conviven con la naturaleza como con un todo. Trevor Herriot, The Road is How. A Prairie Pilgrimage through Nature, Desire, and Soul Tranquila lo sirve desde su pobreza y prosigue inmutable su vida. Cada tanto hace la señal del corazón sobre su pecho. Abnegada, respetuosa y generosa, muestra su amor en los más mínimos detalles.
    Lo deja hacer. Le da tiempo al tiempo, como a los árboles del bosque en que viven. No le exige nada a su nieto. Ni siquiera le pone límites sanadores al estilo occidental, lo que nos choca. Deja que se desfogue en combustión lenta cerrada, y libere el silbador coraje egoísta al que está aferrado. Ese es su, no pensado ni estructurado, método educativo. El vacío meditativo hacia las montañas que contempla quieta en posición media budista con su espalda enderezada. El sucederse de los días con sus simples e importantes quehaceres cotidianos. Cocinar, hacer la colada, cuidar la huerta, ir a buscar agua. Coser, asear, la venta de su producción en el mercado. La siesta, el sol, la lluvia. La meditación en soledad y aceptación de la vida y de la muerte.
    Por supuesto Sang Woo, Yu Seung Ho, posee aspectos positivos. Es limpio, lisonjero, buscador de amistades, observador de los gestos inexplicables de su abuela y del entorno que lo rodea. La purificación transformante lo va jalando, y a su manera comienza a amarla. Sin tragedias banales, sin violencias ni crueles imposiciones, sino con metáforas e insinuaciones apenas perceptibles. Desconozco las minucias de la sana crítica cinematográfica. Las hay excelentes en páginas de Internet. Mi perspectiva es más bien teológica que filosófica, tecnocientífica o artística. Lo creado es objeto de las ciencias. Lo Increado de la Teología. Distintas pero indesligables. Arriesgo la idea de que nuestras mentes son susceptibles de incurrir en errores sistemáticos. Amos Tversky y Daniel Kahneman Ofrezco el mensaje que Jibeuro ha suscitado en la mía. La de un monje enclaustrado. El imponente Silencio que deshace pensamientos, palabras y acciones inútiles, y nos transfigura.
    No es lo único que Lee Jeong hyang desea transmitir. No obstante, Gadamer diría, quien quiere entender un poema, sin excluir del todo la información  que le viene de fuera, debe concentrarse en aquello que le dice el texto. Aquí, el sesgo de la película. Rilke comenzó las Elegías de Duino, con Quién, si gritara, me oiría desde el Orden de los ángeles, mientras se hallaba en ese acantilado mirando y oyendo el mar embravecido en un día de tempestad. Esta información es útil, pero habrá que olvidarla, si queremos saber qué significa en Rilke, y en mí, esa invocación de los ángeles en su poesía.
    Jibeuro es una reconciliación con el Silencio que me transforma. Los psicólogos nos advierten que andamos distraídos, dispersos, en ningún lugar. El silenciamiento resucita, anastàs a los pecadores que cuidamos puercos. Nos devuelve a la Casa del Padre, The Way Home, nuestro verdadero Hogar. Lc 15, 18-21 El ruido es uno de los problemas del hombre postmodernista globalizado. Y sin silencio no hay Shemá lekol, obediencia de la fe, creatividad, amor, tecnociencias éticas, ni vida en el Espíritu. El silenciamiento es atención y escucha. Es el Misterio de las noches orantes de Jesús con su Abba. Quien escucha entra en el Corazón de Dios. La meditación transreflexiva me lleva a redescubrir que no existo sin el mundo y los hermanos desde la Trinidad.



    Pablo d’Ors hace todos los días una hora de silencio. Todas las semanas un día de retiro sin lecturas ni conversaciones. Todos los años diez días de apartamiento completo. Son espacios tiempos de intimidad con los Huéspedes que nos inhabitan. En Biografía del silencio. Breve ensayo sobre la meditación, escribe. Comencé a sentarme a meditar en silencio y quietud por mi cuenta y riesgo, sin nadie que me diera nociones básicas o me acompañara en el proceso. La simplicidad del método, sentarse, respirar, acallar los pensamientos, y la simplicidad de su pretensión reconciliar al hombre con lo que es me sedujeron. Como soy de temperamento tenaz, me he mantenido fiel durante varios años a esta disciplina. Tuve la intuición de que el camino de la meditación silenciosa me conduciría al encuentro conmigo mismo tanto o más que la literatura, a la que siempre he sido aficionado. Durante el primer año, estuve muy inquieto. Cuando me sentaba a meditar, me dolían las dorsales, el pecho, las piernas. A decir verdad, me dolía casi todo. Pronto me di cuenta, sin embargo, de que no había un instante en que no me doliera alguna parte del cuerpo. Era solo que cuando me sentaba a meditar me hacía consciente de ese dolor. Tomé entonces el hábito de preguntarme qué me dolía, cómo me dolía, e intentaba responderme. Lo cierto era que el dolor desaparecía o cambiaba de lugar. No tardé en extraer una conclusión. La pura observación es transformadora. Como diría Simone Weil no hay arma más eficaz que la atención. La inquietud mental, que fue lo que percibí después de las molestias físicas, no fue una batalla menor o un obstáculo más soportable. Al contrario, un aburrimiento infinito me acechaba en muchas de mis sentadas. Me atormentaba quedar atrapado en alguna idea obsesiva. O en algún recuerdo desagradable, que persistía en presentarse durante la meditación. Yo respiraba con armonía, pero mi mente era bombardeada con deseos incumplidos, con la culpa ante alguno de mis múltiples fallos o con mis recurrentes miedos. De todo esto huía con bastante torpeza, acortando los períodos de meditación o rascándome de forma compulsiva el cuello o la nariz. También imaginando escenas que podrían haber sucedido, soy muy fantasioso. Componiendo frases para textos futuros, soy escritor. Elaborando listas de tareas pendientes, recordando episodios de la jornada. Ensoñando el día de mañana. No tardé en extraer de aquí una nueva conclusión. Para mí resultaba casi insoportable estar en silencio conmigo mismo. Motivo por el que me escapaba de mí. Eso me llevó a la certeza de que, por amplios y rigurosos que hubieran sido los análisis que yo había hecho de mi conciencia durante mi década de formación universitaria, esa conciencia mía seguía siendo un territorio poco frecuentado. La sensación era la de quien revuelve en el lodo. Tenía que pasar algún tiempo hasta que el barro se fuera posando y el agua empezase a estar más clara. Con el paso de los meses, supe que cuando el agua se aclara, empieza a poblarse de plantas y peces. Supe también que esa flora y fauna interiores se enriquecen cuanto más se observan. Y ahora, cuando escribo esto, estoy maravillado de cómo podía haber tanto fango donde ahora descubro una vida tan variada y exuberante. Hasta que decidí practicar la meditación con todo el rigor del que fuera capaz había tenido tantas experiencias a lo largo de mi vida que había llegado a un punto en que, sin temor a exagerar, puedo decir que no sabía bien ni quién era. Había viajado a muchos países, leído miles de libros, tenía una agenda con muchísimos contactos y me había enamorado de más mujeres de las que podía recordar. Como muchos de mis contemporáneos, estaba convencido de que cuantas más experiencias tuviera y cuanto más intensas y fulgurantes fueran, más pronto y mejor llegaría a ser una persona en plenitud. Hoy sé que no es así. La cantidad de experiencias y su intensidad solo sirve para aturdirnos. Vivir demasiadas experiencias suele ser perjudicial. No creo que el hombre esté hecho para la cantidad, sino para la calidad. Las experiencias nos zarandean, nos ofrecen horizontes utópicos, nos emborrachan y confunden. Ahora diría incluso que cualquier experiencia, aun la más inocente, suele ser demasiado vertiginosa para el alma humana, que solo se alimenta si el ritmo de lo que se la brinda es pausado. Gracias a esa iniciación a la realidad, que he descubierto con el silencio, supe que los peces de colores que hay en el fondo de ese océano que es la conciencia, esa flora y fauna interiores, solo pueden distinguirse cuando el mar está en calma, y no durante el oleaje y la tempestad de las experiencias. Y supe que, cuando ese mar está en una calma aún mayor, ya no se distinguen ni los peces, sino solo el agua, el agua sin más. Pero a los seres humanos no suele bastarnos con los peces, y mucho menos con el agua. Preferimos las olas. Nos dan la impresión de vida, cuando lo cierto es que no son vida, sino solo vivacidad. Hoy sé que conviene dejar de tener experiencias y limitarse a vivir. Dejar que la vida se exprese tal cual es. No llenarla con los artificios de nuestros viajes o lecturas, relaciones o pasiones, espectáculos, entretenimientos, búsquedas. Todas nuestras experiencias suelen competir con la vida y logran desplazarla e incluso anularla. La verdadera vida está detrás de lo que nosotros llamamos vida. No viajar, no leer, no hablar. Todo eso es mejor que sus contrarios para el descubrimiento de la Luz y de la Paz
    En la Celda Tumba con Cristo. Fue el proyecto de san Antonio del desierto. 250-356, Blog 161, 03 Lo reedita san Buenaventura. 1218-1274 Descansa con Cristo en el Sepulcro, muerto a lo exterior, sintiendo lo que Jesús le dijo al buen ladrón, hoy estarás conmigo en el Paraíso. Abandona toda especulación de orden intelectual y concentra en Dios la totalidad de tus aspiraciones. Si quieres saber cómo se realiza este Misterio, pregunta a la Gracia, no al saber humano. Pregunta al Deseo, no al entendimiento. Pregunta al Gemido Orante, no al estudio y la lectura. Pregunta al Esposo, no al maestro. Pregunta a Dios, no al hombre. Pregunta a la obscuridad, no a la claridad. No a la luz, sino al Fuego Devorador que es Dios. Quien ama la muerte puede ver a Dios. Pues está fuera de duda aquello de, nadie puede ver mi Rostro y seguir viviendo. Muramos y entremos en la oscuridad. Impongamos silencio a nuestras preocupaciones, deseos e imaginaciones. Pasemos, con Cristo Crucificado, de este mundo al Padre. Eso nos basta. Itinerario de la mente hacia Dios. Opera omnia, 5   

    Sang Woo ha viajado directo al desierto y la pobreza de los campesinos, desde Seúl. La cuarta economía ciudadana del mundo con un PIB de U$S 774.000. Sólo detrás de Tokio, Nueva York y Los Ángeles. Con 10 millones de habitantes en la ciudad y 25 millones con el área metropolitana. La quinta después de Tokio, México, New York y Bombay. Su calidad de vida es alta, por encima de New York, London o Melbourne, debajo de Tokio y París. La mitad de los 50 millones de surcoreanos no tiene opción religiosa. El 30% son cristianos, 19% protestantes y 11% católicos, el 20% restante se distribuye entre budistas, la mayoría, confucionistas, musulmanes y otros. Podemos entender, aparte sus sombras y trastornos emocionales de personalidad, el embrollo de Woo en su choque con el erial. El proceso de su silenciamiento hacia un inicio de pureza del corazón. La humanidad es un montón de barro. Yo soy un montón de barro. Mi obligación está en esforzarme hasta que una pequeña flor despunte en el barro de mi mente y de mi carne. Kazantzakis, The Saviors of God
    Woo es la parábola en acción de cada uno de nosotros cuando es trasladado desde sus apegos creaturales a la Dimensión Increada de la Trinidad. Se va desidentificando a la búsqueda de su real identidad. Prestemos atención a unos detalles de desintegración reintegración de nuestras infinitas habilidades en Dios, a los que presto atención desde hace años en mi servicio a los huéspedes que llegan al monasterio. Sang comienza a dormir bien. Hasta la siesta al sol y al aire libre, como lo hace su abuela. Mi hermana solía decirme que si dormía bien se levantaba más buena. Sus caminatas, casi inadvertidas para él no para su inconsciente, por paisajes solitarios, bellos y serenos. El silencio de Kim, atenta, no invasiva ni controladora, ayudándolo cuando él ya no puede, sin esperar nada a cambio, pero sin dejar su filopoética rural. Ve, come, bebe, duerme y no trabajes, pero no salgas de la celda. Sabía que la paciencia de la celda lleva al monje a observar su Orden. Arsenio, 49


    En The Way Home, Woo vuelve a la Casa de su abuela, la comienza a venerar conocer y querer. No se habla de Jesús ni de religión. A las monjas y monjes cristianos nos vendría bien unir estos preámbulos parabólicos a nuestra intensa unión con el Amor y la Gracia de Cristo, al cual nada podemos anteponer. RB, 4, 21 Digámosle cada mañana a nuestro Padre que todo lo que le pedimos de bueno para nosotros lo pedimos para toda la humanidad. Y después no nos ocupemos más de los demás. Hemos hecho de un solo golpe todo lo que podríamos hacer con ellos. Luego no pensemos más en las criaturas y no hablemos más al Esposo que de Él y nosotros, como si Él y nosotros estuviéramos solos en el mundo. Entremos en la intimidad con Él y no le hablemos de otra cosa que de nuestro amor. Perdamos de vista todo lo creado. Cuanto más nos olvidemos de los hombres, más beneficios les haremos. Cuánto más pidamos al Esposo, en la intimidad, en el olvido de todo lo que no sea Él, cuánto más le amemos con todo nuestro corazón, más bien haremos a la humanidad entera que lo que puedan hacer nuestras peticiones. Procuremos gritar el Evangelio con la vida. Toda nuestra vida, por más callada que sea, la vida de Nazaret, la vida del desierto, tanto como la vida pública, deben ser una predicación del Evangelio. Toda nuestra existencia, todo nuestro ser debe gritar el Evangelio sobre los tejados. Toda nuestra persona tiene que respirar a Jesús. Carlos de Foucauld
    La esencia de la Iglesia y su constitución en laicos, consagrados y clérigos no puede entenderse del todo con las categorías de la sociología o del derecho civil y penal. La Iglesia, guiada por el sucesor de Pedro y los obispos en comunión con él, aunque realidad creada y pecadora, no pertenece al orden natural sino sobrenatural. Es un Misterio captable por la fe viva y amante. Nacida del proyecto del Padre, instituida por Jesús y manifestada por el Espíritu. Pero sin luz propia alguna. Sólo refleja la Luz Increada de las Tres Personas de Dios. Ella no cree en sí misma. Cree en la Trinidad, que la hace instrumento de de su Proyecto de salvación universal.
    Jesús no dejó ningún sucesor. Él mismo Resucitado sigue delante de su Iglesia. Esa es la fe que profesamos en el Credo Niceno Constantinopolitano. Creo en un solo Dios Padre Todopoderoso, y en un solo Señor Jesucristo, y en el Espíritu Santo. Y una santa católica y apostólica Iglesia, et unam sanctam catholicam et apostolicam Ecclesiam. Cual complemento directo dependiente e inseparable de nuestra fe en la Trinidad. Hacemos profesión de creer que existe una Iglesia, y no de creer en la Iglesia, para no confundir al Increado Dios Trino con sus creaturas. Y para atribuir sólo a Dios todos los dones y carismas que ha puesto en su Iglesia. Esa Iglesia humilde donde todos, salvo María, somos pecadores, es santa. Porque tiene en su seno la Biblia, la Eucaristía y el Servicio del Amor. Y aunque abarque a pecadores, delincuentes y corruptos, no tiene otra vida que la de la Gracia Divina. Si nos alimentamos de esa vida nos santificamos. Con la dulce obligación de ser santos. Arrepentirnos, confesar nuestros pecados, y repararlos.
    Es un Único Pueblo de Dios. Como un todo sacramental, signo e instrumento, de la íntima comunión con la Trinidad, los hermanos el universo. Todos tenemos los mismos derechos y deberes según nuestra condición y la misma igualdad en cuanto a dignidad, acción, libertad de expresión y misión de anunciar el Evangelio, con distintos ministerios, carismas y servicios. En Ella no hay lugar para la uniformidad ni el carrerismo o la relegación. La asamblea visible y la comunidad espiritual, la Iglesia terrestre y la Iglesia adornada con bienes celestiales no son dos cosas distintas sino una realidad compleja integrada de un elemento divino y otro humano, cual el Verbo hecho carne. Fuera de esta Madre a la que amamos con fidelidad inquebrantable, que nos da a luz y nos educa, no hay plenitud de salvación. En esta Esposa de Cristo todo lo humano está ordenado a lo divino, lo visible a lo Invisible, la acción a la contemplación, y la Iglesia al Reino de Dios.
   
    No obstante, cada uno de nosotros pertenece a la misma humanidad y compartimos con la entera familia de los pueblos, la esperanza de un inicio de mundo mejor. Cualesquiera sean las vivencias humanas fuera de la Iglesia si eso es posible, tienen una real relación con la de Jesús y su Iglesia. Por la Encarnación toda experiencia angélica humana o cósmica es una cierta experiencia del Hombre Dios. Aun cuando Dios ni se nombre y pareciera estar ausente. En Jesucristo es imposible separar a Dios del Hombre. Aventamos 1.300 pensamientos y 800 sentimientos por día. Solemos quedarnos con los negativos. No proyectemos eso al lenguaje místico secular de la situación humana, lo desconocido y la felicidad. Unos por el silencio de Jibeuro. Otros por el fugaz enamoramiento de dos adolescentes con cáncer terminal, cual en The Fault in Our Stars de John Green, protagonizada por S. Woodley y A. Elgort. Y aquellos por un naufragio que destroza y reconstruye planes vitales, Cast Away de Zemeckis con Tom Hanks y su amigo Wilson Volleyball. La culpa, querido Bruto, no es de nuestras estrellas, sino de nosotros mismos, que consentimos en ser inferiores. Shakespeare, Julio César  
  
    Lo secular y lo profano tienen dimensiones cosmoteándricas expresadas en lenguajes distintos. Jesús no es propiedad exclusiva de la Iglesia Católica en su carismática institucionalización. Con discernimiento aprendemos mucho de Cristo en otras institucionalizaciones del Espíritu. Y no sólo en las cristianas o religiosas sino también en las sólo humanas agnósticas o ateas. La Singularidad Absoluta de Cristo y de su Única Iglesia, donde Jesús está en Plenitud, no equivale a decir que otros no precisen Logoi sublimes del Infinito Increado.
    Esos Logoi nos ayudan a los católicos a no cerrarnos asfixiándonos en una secta fanática. A ser por esencia inclusivos en salida que abraza la Totalidad. A expresar mejor la Plenitud que custodiamos y nos sobrepasa por todos los costados, y actuando en todas partes. Con nuestros límites de humildes pecadores perdonados, en unión con todos los seres humanos, retornando a la Gracia del Señor Jesús que no cesa de venir a nuestro encuentro. De mil maneras volvemos a relatar el drama pascual de nuestro breve pasaje por este mundo. Dios Amor jamás nos olvida y su Memoria es también nuestra existencia de Encuentro y Silenciamiento. Hubo tiempo antes de que los organismos de este planeta tuvieran consciencia de sí mismos. Y habrá tiempo después que todo desaparezca y sea olvidado. Pero si te preocupa que el hombre caiga en el olvido, te aconsejo que ni lo pienses. Dios recordará, y para siempre, qué es lo que hizo todo el mundo. Peter van Houten, Un dolor imperial

sábado, 5 de julio de 2014

202. Dimensión mística de Casa de Silencio y Camino Contemplativo Nazaret, Dan 7
  

    Yo estaba mirando, en las visiones nocturnas, y vi que venía sobre las nubes del cielo como un Hijo de Hombre, Mt 8, 20 que avanzó hacia el Anciano de los días, ‘athik yomim Y le fue dado el dominio, la gloria y el Reino. Lo sirvieron todos los pueblos, naciones y lenguas. Su dominio es eterno, nunca pasará. Y su reino jamás será destruido. De acuerdo a la Teoría fisicomatemática de Todo, llamada M de Magna, defendida por Stephen Hawking en El gran diseño, podrían coexistir muchos universos paralelos con historias alternativas. La serie televisiva Fringe, ciencia al límite se basa en ello. La ciencia puede soñar[i]. Hay más cosas en el Cielo y en la Tierra, que todas las que puede soñar tu filosofía. Hamlet Aun cuando no se ha podido probar la tomamos cual parábola o comparación de ese Universo de la Trinidad que nos revela la Pascua de Jesús en su Iglesia. Desde la fe, la apocalíptica se mueve con facilidad entre la Iglesia peregrinante, purgante y celestial en su afán por dar claridad al proceso de la Historia. Vivimos con Universos paralelos a nuestro lado pero nos es difícil experimentarlos.
    Los dones y carismas del Paráclito nos ayudan a pasar a esa Otra Dimensión Mística. El modo humano es asumido por el modo divino. Las dimensiones se solapan. No existe una dimensión ascética en exclusiva distinta por completo de otra mística. Se trata de un predominio en la sinergía de lo humano divino. La oración de simplicidad, esa atención o sentimiento amoroso hacia las Tres Personas, a Jesús María José, u otra Revelación,  comienza a abrir la Puerta y nos hace Ser Más en el Espíritu. Ap 4, 1-3 El Paráclito es el único en abrir la Puerta Jesús y María, imagen espléndida de su proyecto trinitario, por su maternidad divina virginal e incesante intercesión. Misal de la Virgen María, Misa 46  Entramos en un simple juicio intuitivo, o juicio inmediato no discursivo, de la Vida, la Verdad y el Amor. La Trinidad es percibida de forma fuertísima e inefable, no sólo creída y a veces en oscuridad y desolación. Se suspenden, con mayor o menor intensidad los actos naturales de las demás potencias, cual razonar, desear, sentir, para abrirlas más a la Luz de la Nueva Dimensión. Teresa de Jesús habla de un recogimiento de todo el cuerpo y la psiquis en lo Infinito Metafísico de Dios. Blog 191. El gozo de evangelizar desde la Contemplación en Pobreza y Salida Da al sabio la ocasión, y su sabiduría de discípulo misionero aumentará.
    El carisma no es un tubo de ensayo con agua destilada. Hay que vivirlo con energía reinterpretándolo una y otra vez, y en cada cultura. Es verdad que se corre el riesgo de equivocarse, de cometer errores. Esto no debe frenarnos, porque si no lo reinterpretamos e inculturizamos se corre el riesgo de errores mayores. Debemos pedir perdón y mirar con vergüenza los fracasos apostólicos causados por falta de valentía. Pensemos, en las grandiosas intuiciones pioneras de Mateo Ricci, 1552-1610 que en su época, se abandonaron. Paráfrasis del Papa Francisco Hacemos un primer bosquejo, teológico descriptivo monástico, del carisma y espiritualidad de Casa de Silencio y Camino Contemplativo Nazaret. En esa Dimensión Mística donde, en especial los pobres de Espíritu, saben entrar mucho mejor. Blog 171, Consagración a Jesús María y José para entrar en comunión monástica La trilogía, Blog 199, El camino creado de las Trilogías hacia el Increado de la Trinidad está en su nombre que les da identidad personal orante en comunión para la misión. La tesis es Casa de Silencio, los hogares que rodean la Skené. La antítesis Camino Contemplativo. La síntesis Nazaret. En cada uno veremos los contornos teológicos, antropológicos y ecológicos. Hay que discernir a Hegel, 1770-1831 y aprender de él. Casa, Camino y Nazaret son el Hogar, el Camino y la Consumación de la Trinidad. Nuestra manera de pensar y cómo pensamos es clave. Kahneman, Daniel, Pensar rápido, pensar despacio, Debolsillo, México, 2014, 666 p.  Si Dios Uno y Trino primerea y sale al encuentro del hombre, en su autocomunicación hacia Adentro y hacia afuera, entonces la Trinidad económica es la Trinidad inmanente, y viceversa.
    Las cosas son así al pasar de lo teologal al giro antropológico y luego al giro ecológico. Ayudó el cambio de paradigma científico con la física cuántica. Para Jesús, en este universo en proceso con males físicos y morales, Dios cuida de toda creatura conservándola con su providencia. Hace caer la lluvia, viste a los lirios del campo, y alimenta a las aves. Con la misma atención con que se esmera por cada cabello de nuestra cabeza. Sin confundir lo místico con lo científico. La experiencia de comunión con los hermanos es incompleta sin la comunión con el universo, con las estrellas de dónde venimos, el sol nuestro hermano, la luna nuestra hermana y la Tierra nuestra madre. Dios está implicado en su universo y sufre cuando se lo destruye. Lejos de ser una parte de él, es la Trinidad de las Personas quien lo diversifica, energetiza y vivifica. Blog 59. El sufrimiento de los sistemas ecohumanos asumidos en Cristo


    Casa de Silencio. Casa, en griego oîkos y êthos, es el Hogar, la Ética y la Familia donde cada miembro reside y entra en relación con los Otros. Dios, los hermanos ángeles y humanos, las cosas la naturaleza y el cosmos. Como sucede con Camino, Casa es un arquetipo original y fundamental. Organiza el espacio físico, el espacio humano y el espacio Divino. Se constituye en el conjunto ordenado de los valores, costumbres y motivaciones últimas de lo personal, social y religioso. El primer ámbito que la fe ilumina en la ciudad de los hombres es la familia. El Encuentro con el Resucitado, el dejarse jalar y guiar por su amor, amplía el horizonte de la existencia, y le da una esperanza sólida que no defrauda. Lumen fidei, 53
    Al explicitar con un genitivo de Silencio a Casa, queremos resaltar que es ante todo el contorno teológico. La Casa de Dios Padre, la Patria de la Trinidad, donde hay millones de moradas y Jesús nos prepara el lugar, Jn 14, 2 El Padre es el Misterio de Silencio inseparable de la Palabra Cristo, del Encuentro Espíritu, y de toda la creación. La Sabiduría se ha construido su Casa. Envió a sus servidoras a proclamar. El que sea incauto que venga aquí, y el falto de entendimiento que corra a comer de mi pan y a beber de mi vino. Abandonen la ingenuidad y vivirán, y sigan derecho por el camino de la inteligencia. La señora necedad, en cambio, es turbulenta, estúpida y no sabe nada. Se sienta a la puerta de su casa para gritar a los transeúntes que van derecho por el Camino. Las aguas robadas son dulces y el pan quitado a escondidas, delicioso. Pero ellos no saben que allí están los fantasmas, y sus invitados en las profundidades del Abismo.  Prov 9, 1-18 
    La Sombra del Padre es José. María es Ícono del Encuentro en el Espíritu. Jesús la Palabra hecha carne. Basta un año de meditación perseverante, para percatarse de que se puede vivir de otra forma. La aventura del silencio interior nos concentra, nos devuelve a Casa, nos enseña a convivir con nuestro ser, agrieta la estructura de nuestra personalidad hasta que, de tanto silencio, la grieta se ensancha y la vieja personalidad se rompe y, como una flor, comienza a nacer una nueva. Meditar es asistir a este fascinante y tremendo proceso de muerte a la verborrea y el renacimiento a la escucha de Dios y de los demás[ii]. Pablo D’Ors
    Lo antropológico trascendental interrelacional y totalizante es el Evangelio de la familia, su pastoral ante los nuevos desafíos, su responsabilidad para transmitir la fe y la educación, y las paredes que lo cobijan. Blog 108, La transmisión de la fe inseparable de la educación del hombre El fundamento del Evangelio de la familia radica en la existencia y predicación de Jesús, que nació en Belén, migró fugitivo a Egipto, vivió y creció en la familia de Nazaret. Participó en las bodas de Caná, donde transfiguró la fiesta con el primero de sus signos, presentándose como el Esposo que se une a la Esposa. Jn 2, 1-11 y 3,29 En la cruz, se entregó con amor hasta el final, y en su cuerpo resucitado estableció relaciones nuevas entre los seres humanos. Jesús concede al hombre y a la mujer, en el reconocimiento y aceptación de la bondad de la diferenciación y complementación sexual, recuperar el Principio del Génesis, según el cual Dios los unió en una sola carne. Mt 19,4-6 Por el cual, con la gracia de Cristo, son capaces de amarse para siempre y con fidelidad, en el Misterio Pascual que enlaza sus anillos para siempre.
    Jesús asumió el amor humano y lo perfeccionó dando al hombre y a la mujer un nuevo modo de amarse, que tiene su fundamento en la irrevocable fidelidad de Dios. Por el amor nupcial entre el hombre y la mujer el gran Misterio del amor entre Cristo y su Iglesia se hace presente en el mundo. Ef 5, 31-32 Ellos poseen el carisma, 1 Cor 7, 7 de edificar la Iglesia, con su cuerpo esponsal y con la tarea de la procreación y educación de los hijos. Unidos por el orden de la creación y el vínculo sacramental indisoluble, los esposos viven la belleza del amor. Deben crear un nuevo lenguaje y una cultura del compartir y solidaridad familiar para Orar Leer TrabajarOración girando alrededor de la Eucaristía, Lectio Divina y Trabajo productivo en unión con Jesús. Enseñar el perdón y la amistad. Descubrir lo esencial del ser humano y la Presencia que lo inhabita, y origina su itinerario hacia Dios. El diálogo interreligioso para superar la pobreza y la injusticia. 
    El cuidado del día a día y las dificultades del crecimiento. Asistidos por el santo buen humor, signo de la Gracia. Y la inmensa energía de la Redención que opera en los hogares. Luchar por el testimonio de la hermosura de la familia cristiana via pulchritudinis, contra todo consumismo, individualismo, codependencias y adicciones de alcohol drogas y pornografía, que a veces se usan y comparten en familia. De los juegos de azar y de los videojuegos, de las redes sociales y la fragmentación disgregante o esquizofrenia familiar, en japonés Togo Shitcho Sho’, trastorno de la integración. Jugar con los niños. El descanso del domingo que pone la dignidad de la persona por encima de todo sistema económico financiero, salvaguardar la agricultura, combatir la deforestación. Anunciar el Evangelio social en las periferias porque Dios no es neutro, corre al encuentro del que más necesita y lo necesita a Él.
    Lo ecológico en la Casa, aparte su arquitectura y mantenimiento, es la maceta o jardín. Es imposible una casa sin aire puro, sol en abundancia, agua bien potable, tierra llena de flores. Sin cuidado del jardín pequeño que la rodea. Comprometerme con la defensa de la vida y del ambiente, con la ecología de la biodiversidad mundial, Océanos, Bosques, Amazonia y Antártida, los campesinos y aborígenes, el desarrollo sostenible, el respeto a la naturaleza, el amor a la madre tierra como fuente de alimento, casa común de todos y altar del compartir humano. Y dejar de atender el sistema teohumanoecológico de mi hogar, de mi oratorio o pustinia, de la salud e higiene de mi cuerpo, de mi habitación y del primor de mi jardincito, y los de mis prójimos, es ilusión virtual con exclusión de los ninguneados[iii].

    Camino Contemplativo. Lo teológico del Camino es Cristo, Uno de la Trinidad. El Camino la Verdad y la Vida. Jn 14, 6 Nazaret es el Ícono de la Trinidad como Historia. El adjetivo Contemplativo remoza la fidelidad a la oración mística unida con el celo por extender el Reino de Dios y su justicia a todos los hombres y ecosistemas. Esa es la solicitud apostólica de este Camino Nazareno de Casa de Silencio. La pasión por la contemplación es una forma de participar en la misión del Resucitado. Con su Cuerpo Místico y Cósmico. Por eso Casa de Silencio queda adherida a un Monasterio contemplativo. El monacato es ya una manera importantísima de hacer apostolado. Orar es transfigurar el mundo. No tenemos como Grupo otros servicios en la pastoral activa. Sí los pueden tener sus miembros, si así lo desean o son enviados y aceptan.
    Los carismas enriquecen a la Iglesia. Generan movimientos que animan estructuras debilitadas, revitalizan y organizan. Nuestra misión y fin, o servicio como carisma, es que desde nuestra contemplación irradiamos esa misma contemplación, dentro de la espiritualidad monástica mariana para laicos. Testigos de que sólo desde Dios todo se armoniza, los fragmentos se unitotalizan. El hombre es una síntesis de finitud e Infinitud, de temporalidad y Eternidad. Siente que depende o es creado por el Otro Absoluto. Eso le imposibilita alcanzar por sus propias fuerzas el equilibrio y el reposo. Se fue a un país lejano, ha dejado la Casa de su Padre. Lc 15, 3 Con comunidades orantes, retiros y talleres, colaboramos con Jesús para que retorne. Difundimos la primacía de la vida según el Espíritu o vida de la Gracia. Sin olvidar el lugar privilegiado de los pobres en el Pueblo de Dios[iv]. Evangelii Gaudium, 197-201. Leardi, Juan Carlos, Creer Discernir Evangelizar, Servicios, Puebla de los Ángeles, 2014, 287 p.
     Lo antropológico está en que un Camino Orante muestra al ser humano en constante proceso o epéktasis, desde su concepción a su muerte y eternidad, entre el pecado y la Gracia[v]. Proceso de desapego, desidentificación, desapropiación hacia la Trinidad en unión con la Totalidad fraternal y cósmica. La formación inicial, permanente, institucional y vital es esencial a este Camino que jamás acaba. Lo ahistórico no tiene cabida en él. Casa y Camino son energías dinámicas desde la Historia de la Trinidad. Al haber Procesiones en las Personas Divinas, hay Misiones y procesos en las creaturas. Dios Trino habla de la historia, y la historia habla de la Trinidad
    Lo ecológico es un sendero que se planifica desde la contemplación del Resucitado. Las cosas no son divinas. La Trinidad las trasciende al Infinito. Pero la creación es objeto de su Amor, la originaria autorevelación de Dios. El Mundo no es parte de Dios, ni un elemento de un proceso dialéctico intradivino. El Mundo creado y finito es la Casa Vital del hombre, un camino de la revelación de la Gloria y Omnipotencia del Trino Dios. Lo creado posee tres niveles de referencia entrelazados. Acto creador de la nada, exclusivo de Dios, como su conservación y concurso divino entre Libertad de Dios y libertad del hombre. El universo creado tiene su causa final intrínseca en la Nueva y Eterna Alianza de Jesucristo. El orden de la creación manifiesta la voluntad salvífica de Dios y exige la capacitación de cada ser humano para asumir su activa responsabilidad con la ecología y su ética medioambiental, con su persona, y con la configuración socio económica política según la ética social. Así como la realización del problema último del Sentido de la vida en relación con Dios y la comunidad eclesial. G.L. Müller, Dogmática


    Nazaret. Lo teológico de la Sagrada Familia de Nazaret, a la que Casa de Silencio se consagra, está en el Misterio del Amor Encarnado. La Encarnación del Verbo en el seno de María casada con José, nos revela que la familia es la Casa y el Camino para la revelación de Dios al hombre. El lugar ordinario y cotidiano del encuentro con Jesús en medio. El Pueblo de Dios mira a la Sagrada Familia de Nazaret cual Punto de interrelación personal en el amor. Referencia para toda realidad pascual familiar en sus sufrimientos y alegrías. Intransigente con el mal, misericordioso con las personas. Creando un ambiente favorable a la castidad y a la ley de la gradualidad. Humanae vitae Es tan estrecha la comunión entre Jesús María y José, de amor total en unidad fiel y fecunda, que forman un Único Corazón Glorioso, Manifestación del Dios Uno y Trino.
    Mientras la Cristología y Mariología avanzan de prisa, no es así con la Joseología. Otra Puerta debe abrirse en el Cielo por la peregrinación de la fe y los dones del Espíritu. Para que los pobres, los teólogos y los místicos puedan ver, junto a la Virgen Mujer, Ap 12, 1-3 otro gran Signo, el del Varón Esposo al servicio de la paternidad, Depositario del Misterio de Dios, la Encarnación Trinitaria Pascual. Redemptoris Custos
    Su antropología está en la Casa familiar, que se va transformando con el pasar del tiempo y, permaneciendo por Gracia, signo eficaz de la existencia del Amor de Dios, Santuario de la vida, la verdad y el amor. Quien se sienta cómodo en este mundo, y haga de él su casa, no sirve para la espiritualidad monacal, sea enclaustrada o laical. Cuando la Trinidad lo llame a su Hogar, su incomodidad se hará insoportable. Sólo si lo deja todo, morirá y entrará en la Dimensión monástica, aquella del perderlo todo por el Todo, ganando el ciento por uno. Desaparecer amando hacia el Resucitado, será su Ley y su Espíritu, tanto en el monasterio como en el supermercado. Blog 115, Clave del monacato para monjes y laicos, Desaparecer amando hacia Jesús La primera experiencia de amor en relación total tiene lugar en la familia. En consecuencia la necesidad de que cada niño cuente con el calor y el cuidado protector de sus padres y hermanos en una Casa donde habita nuestra Paz. Deben poder percibir que Jesús está con ellos y nunca están solos. La familia es Escuela de humanismo integral. Escuela del amar. Escuela de comunión. Escuela de trascendentalidad relacional y totalizante. Escuela que desarrolla a cada uno de sus miembros en el amor irrestricto. Guarda las diferencias complementarias. Y da la capacidad de entrega magnánima.
    La ecología de Nazaret, נָצְרַת en hebreo, الناصرة en árabe, la derivamos de su etimología נצר, que significa retoño, brote, flor, defender, preservar. Is 11, 1-9 Saldrá una rama del tronco de Jesé y un retoño brotará de sus raíces. Sobre él reposará el Espíritu del Señor. Hoy tiene unos 73.000 habitantes. En tiempos de Jesús era una Ranchería insignificante, que hubiera cabido en la actual Basílica. A 10 kms al noroeste del monte Tabor, a 23 del Lago de Tiberíades, y 34 del Mar Mediterráneo, Nazaret a 450 msnm surge con el esplendor del verdor. Esa fue mi experiencia al visitarla, el desierto del sur de Israel se había convertido en un jardín. Si Pablo VI en su peregrinación de 1964 pudo decir, Nazaret es la escuela donde empieza a entenderse la vida de Jesús, y su primera lección es el silencio. Nos atrevemos a agregar. Y su segunda lección es la preservación de los sistemas teohumanoecológicos. No podía ser de otra manera para la ciudad de Jesús de Nazaret, el Primogénito de la toda la creación, en quien y para quien fue creada la Totalidad. Col 1, 15-17 De cuya Sede en la Jerusalén Celestial brota un río de Agua de Vida. A cuyos lados fructifican árboles que curan a todos los pueblos, naciones y lenguas. Pues su Reino jamás será destruido. Ap 22, 1-5, Dan 7
Jesús, María y José
en ustedes vemos reflejado
el esplendor del Silencio la Palabra y el Encuentro,
de nuestra fe en el Camino monástico contemplativo laical,
vivido con esperanza en nuestras Casas.

Sagrada Familia de Nazaret,
hagan de nuestros hogares
lugar de comunión con la Totalidad de Cristo y cenáculo de oración y diálogo,
escuelas de discípulos misioneros del Evangelio, de la solidaridad y la justicia social,
pequeñas Iglesias domésticas de amor alegría y paz.


Jesús, María y José,
que nunca haya en nuestras familias episodios
de violencia, de cerrazón y división.
Que quien haya sido herido o escandalizado
sea pronto consolado y curado. En Salida hacia la humanidad y el universo.



Sagrada Familia de Nazaret,
hágannos tomar conciencia de nuestra Consagración,
discernir el carácter santo e inviolable de la familia,
imagen de la Trinidad, Padre Verbo y Espíritu,
que nos dan la Energía del Reino de Dios para transfigurar el Mundo. Amén

[i] La humanidad necesita hombres prácticos, que sacan el mayor provecho de su trabajo, y sin olvidar el interés general, salvaguardan sus propios intereses. Y necesita también soñadores, para quienes el desarrollo de una tarea sea tan cautivante que les resulte imposible dedicar su atención a su propio beneficio. Soy de los que piensan que la ciencia tiene una gran belleza. Un científico en su laboratorio no es sólo un técnico, es también un niño colocado ante fenómenos naturales que le impresionan como un cuento de hadas. Madame Marie Curie, 1867-1934
[ii] El Padre Pablo d'Ors, * Madrid 1963 es presbítero y claretiano, miembro del Pontificio Consejo de Cultura. Nació en una familia de artistas y se formó en un ambiente cultural alemán. Nieto del ensayista y crítico de arte Eugenio d'Ors, hijo de una filóloga y de un médico dibujante, y discípulo del teólogo y monje benedictino de Westfalia Elmar Salmann. Se graduó en Nueva York y estudió Filosofía y Teología en Roma, Praga y Viena, donde se especializa en germanística. Doctor con la tesis Teopoética, Teología de la experiencia literaria. Profesor de Dramaturgia y de Estética Teológica. Al conocer al jesuita alemán Franz Jalics, con quien colaboré en espiritualidad en Argentina, este año fundó la asociación Amigos del Desierto. Su finalidad es profundizar en la dimensión contemplativa de la vida cristiana e iniciar y acompañar a otros en la aventura de la interioridad. Algunos de sus libros. El Estreno, 2000. Andanzas del impresor Zollinger, 2003. El estupor y la maravilla, 2007, adaptada luego al teatro. Lecciones de ilusión, 2008. Sendino se muere, 2011. Sus obras están  emparentadas con la literatura de Hermann Hesse, Milan Kundera y Franz Kafka. Tiene una Trilogía del silencio, conformada por El amigo del desierto, Anagrama, 2009, Biografía del silencio, Siruela, 2012, y El olvido de sí, Pretextos, 2013. Esta última sobre Charles de Foucauld. Si hay alguna biografía poco convencional e inesperada, esa es la de Foucauld.  no quiso ser un aventurero, lo fue contra su voluntad. Lo que me apasiona de su vida y lo que finalmente me impulsó a escribir una novela sobre ella, fue que este hombre escuchó en todo momento su conciencia y la obedeció. Ya es insólito escuchar la propia conciencia, y más siempre, pero mucho más aún es obedecerla. Tuvo el coraje para romper con lo que estaba haciendo para abrirse a algo muy diferente, y ello no sólo una o dos veces en su vida, como hacen algunos, sino muchas.
[iii] Pasé hambre por ti, y ahora la padezco de nuevo. Tuve sed por ti y ahora me abrasa en los labios de mis pobres. Para que, por aquella o por esta sed, pueda jalarte hacia mí y hacerte caritativo y misericordioso. Por los mil beneficios con que te he colmado, por favor, dame algo. No te digo que me arregles mi vida o me saques de la miseria. Sólo te imploro pan y vestido y un poco de alivio para mi hambre. Estoy preso. No te ruego que me liberes. Sólo quiero que, por tu bien, me hagas una visita. Con eso me bastará. Y por eso te regalaré el Cielo. Yo te libré a ti de una prisión mil veces más dura. Pero me contento con que vengas a verme de cuando en cuando. Yo, que puedo alimentarme por mí mismo, prefiero dar vueltas a tu alrededor, mendigando. Extendiendo mi mano a tu puerta. Mi amor llega a tanto que quiero que tú me alimentes. Por eso prefiero, como amigo, tu mesa. De eso me glorío. Tú eres mi bienhechor. San Juan Crisóstomo, 347-407, Hom. 15
[iv] Necesitamos dar algunas de nuestras posesiones con el fin de estar sanos. La riqueza que se acumula corrompe a aquellos que la poseen. Todo don que no es compartido se pudre. Si no somos generosos con nuestros dones, seremos envidiados con amargura y al final nos volveremos amargados y rencorosos. Sólo podemos estar sanos si entregamos algunas de nuestras posesiones a los otros. Entre otras cosas, esto debería recordarnos que necesitamos dar a los pobres no porque ellos lo necesitan, aunque sí lo necesitan, sino porque, si no damos a los pobres, no podemos estar sanos. R. Rolheiser
[v] Ringrazio il Signore Dio nostro che ha creato un’opera così meravigliosa nella quale trovare il suo riposo. Creò il cielo, e non leggo che si sia riposato. Creò la terra, e non leggo che si sia riposato. Creò il sole, la luna, le stelle, e non leggo che nemmeno allora si sia riposato. Ma leggo che ha creato l’uomo e che a questo punto si è riposato, avendo un essere cui perdonare i peccati. S. Ambrogio, Exameron, IX, 76
Come si vede, secondo Ambrogio Dio crea l’universo per l’uomo, e crea l’uomo per poter essere misericordioso. Non si può dire che crei l’uomo peccatore o perché pecchi, ma si deve  con certeza dire che il riposo ultimo di Cristo nella morte redentiva e la manifestazione della divina misericordia rappresentano il senso ultimo e più alto della creazione. Biffi, Giacomo, La multiforme sapienza di Dio. Esercizi spirituali con Giovanni Paolo II, Cantagalli, Siena, 2014, 232 p.